Durante este último año y medio de pandemia el desarrollo de nuestro día a día ha sido sin duda diferente y en muchos casos más difícil. Y si no que se lo digan a los trabajadores y usuarios de centros como el de Acpacys.
La Asociación Cordobesa de Parálisis Cerebral y Afecciones Similares ha puesto el acento en sus numerosas reivindicaciones. Su presidenta, Rafaela Chounavelle, señala que "los apoyos materiales pueden ser elementos físicos y propiamente materiales", así como que "la gran mayoría tienen necesidades relacionadas con su salud que son básicos para que la persona pueda ejercer su participación".
Lo ha hecho en un acto con motivo del Día Mundial de la Parálisis Cerebral. Una pluridiscapacidad que en el 80% de las personas que la padecen requiere de más atención y apoyo. De ahí que la Junta de Andalucía haya incrementado el concierto social en atención infantil temprana o que la Diputación de Córdoba, a través del Instituto Provincial de Bienestar Social, mantenga activos programas para mejorar la calidad de vida de usuarios y familiares. Al igual que el Ayuntamiento de Córdoba. Su delegado de Inclusión y Accesibilidad en el Consistorio, Bernardo Jordano, mostró su sensibilidad con este colectivo diciendo que "pensando en positivo 168 horas da para generar oportunidades en muchos sentidos, explorar necesidades y no tirar la toalla".
El lema del Congreso Nacional de Parálisis Cerebral que se celebra estos días en formato online y que congrega a 900 personas es 168 horas. Es el tiempo que dedican los cuidadores a mirar por quienes sufren parálisis cerebral. ¿Les suena la abreviatura 24/7? En este caso se cumple a rajatabla. Porque la entrega durante 24 horas los siete días de la semana es innegociable.
