Sindicatos y patronal retoman hoy la negociación después de registrar tres fracasos en las reuniones mantenidas desde el miércoles 17 de noviembre. El último, el lunes, cuando los representantes de los trabajadores pusieron fin al diálogo de madrugada porque, según, Antonio Montoro, secretario provincial de FICA-UGT, la Federación de Empresas del Metal de la Provincia de Cádiz (Femca) “se ríe” de la plantilla y trata de desgastar la movilización sin mover “ápice” la última propuesta que puso sobre la mesa.
Sin embargo, la patronal se muestra optimista y confía en que hoy mismo se llegue a un acuerdo tras acercar posturas con los sindicatos entre el lunes y el martes, según apuntan fuentes del sector próximas a la negociación. Desde los sindicatos, cuestionados por este particular, aseguran que “no es exactamente así”, aunque acudirán a la reunión de esta mañana con la intención de “darlo todo” y con el objetivo de que se pueda cerrar un acuerdo.
Hay que recordar que la patronal propuso en un primer lugar una subida salarial para 2021 del 2% a tabla, con efectos retroactivos desde el 1 de junio de este año; del 2% a tabla en 2022; y otro 2% a tabla en 2023. Si a final de ese ejercicio el IPC real de los tres años hubiera sido superior a las subidas, se abonaría a cada trabajador una paga con la diferencia.
Ante la negativa de los sindicatos, el equipo de mediación del Centro Andaluz de Relaciones Laborales planteó una subida del 1,5% a tabla en 2021, con efectos retroactivos desde el 1 de junio de 2021, además si el IPC excede de ese 1,5%, el exceso iría a tabla en un 20%; en 2022, un 1,75% a tabla, y si el IPC excede de ese 1,5%, el exceso iría a tabla en un 25%; y en 2023, un 2% a tabla, y si el IPC excede de ese 2%, el exceso iría a tabla en un 30%.
El secretario provincial de UGT detalló ayer que la petición a la patronal pasa por un incremento “del 2,5% fijo, que es lo que genera atrasos desde enero” y “con ese atraso que no genera, la intención es que se compense los días de huelga de los trabajadores, para que en esta fecha, crítica además, los trabajadores no tengan esa merma, porque muchos de ellos cobran 1.000 euros”. Además, tienen la intención que “con lo que falta del IPC de lo que haya que regularizar a final de año, el 80% vaya a tabla y el 20% a una paga, eso en los dos años, ellos siguen hablando de tres, pero para firmar un año más lo tienen que pagar”, y avisó de que “si quieren un tercer año tienen que pagar un 100% de todo”.
Montoro también advirtió de que “en los acuerdos a más años hay que dejar muy claro el tema de los eventuales, el 75% del total, y como los atrasos se hacen a final de año, cuando el IPC se regula, si hay algún eventual que lo hayan despedido en mayo, no cobra ni lo va a reclamar porque no lo llaman más”.