“Es importante mantener un diálogo abierto y honesto con los palestinos sin generar ilusiones que estén desconectadas de la realidad y únicamente puedan llevar a la violencia y la frustración”, dijo Lieberman, según un comunicado de su oficina.
El jefe de la diplomacia israelí aseguró que “no es realista” pretender alcanzar “un acuerdo sobre las fronteras finales en nueve meses o uno completo (sobre todos los temas en disputa) en dos años”.
Lieberman hacía referencia a la información publicada hoy por el diario egipcio Al Ahram, según la cual la Casa Blanca presentará un plan de paz en el que Israel se comprometería a crear un Estado palestino como máximo dos años después del regreso a la mesa de negociaciones.
El diálogo de paz se encuentra paralizado desde hace más de un año y la Autoridad Nacional Palestina (ANP) rehúsa reanudarlo hasta que Israel detenga por completo la ampliación de los asentamientos judíos en Jerusalén Este y Cisjordania, una de sus obligaciones en el marco de la Hoja de Ruta, el plan de paz presentado en 2003 por el Cuarteto de Madrid (la ONU, los EEUU, la UE y Rusia).
La ANP, que preside Mahmud Abás, quiere además que el regreso al diálogo no sea desde cero, sino a partir de lo ya avanzado con el anterior primer ministro israelí, Ehud Olmert, y que contenga plazos claros de cumplimiento, para evitar que Israel se quite de encima la presión internacional sin necesidad de avanzar hacia la creación de un Estado palestino.
Esta mañana, tras reunirse en la localidad egipcia de Sharm el Sheij con su homólogo Hosni Mubarak, Abas repitió que “las negociaciones con Israel se reiniciarán en el momento en que se detengan los asentamientos y haya un reconocimiento de la legitimidad internacional” de un Estado palestino.