Los trabajos para restaurar y rehabilitar la Real Parroquia de los Santos Juanes de València, declarada Monumento Histórico Artístico Nacional en 1947, han entrado este jueves en una nueva fase.
Si de momento se trabajaba en la parte pictórica con la restauración de los frescos de la bóveda del templo, ahora ha comenzado la instalación del material para arrancar con la segunda parte: la intervención arquitectónica.
El objetivo es subsanar las deficiencias estructurales y constructivas para garantizar la conservación del edificio, incluyendo sus fachadas, explica la Fundación Hortensia Herrero como impulsora de la intervención.
Este trabajo está dirigido por el arquitecto Carlos Campos y ejecutado por la empresa Estudio Métodos de Restauración (EMR). Los primeros trabajos comienzan en la Plaza de la Comunión de San Juan.
Se trata de un proyecto fruto del acuerdo firmado hace tres años entre el Arzobispado de Valencia y la fundación. Hasta ahora se han llevado a cabo trabajos en el interior del edificio con la restauración de las pinturas al fresco de la bóveda del templo, obra de Antonio Palomino.
Fue un proceso a cargo del equipo dirigido por la catedrática Pilar Roig, profesora del departamento de Conservación y Restauración de Bienes Culturales e investigadora del Instituto Universitario de Restauración del Patrimonio de la Universitat Politècnica de València (UPV).
