En Castellón, parece cada vez más cercana la retirada de la cruz del parque de Ribalta, aunque ya hay presentado un contencioso-administrativo para evitar este empeño del ayuntamiento. En ese recurso se defiende que la cruz del Ribalta es un lugar neutro y religioso.
Ha sido Vox la entidad que ha presentado una demanda contra el decreto de la concejala Verónica Ruiz que ordena la retirada de la Cruz del parque Ribalta de la capital de La Plana.
Luciano Ferrer, concejal de esta formación política en el Ayuntamiento de Castellón, ha explicado a través de un comunicado, que la cruz del Ribalta, al haber sido resignificada en 1979 y estar despojada de toda la simbología franquista ha quedado como un símbolo exclusivamente religioso.
Al respecto, ha aclarado que la jurisprudencia de los Tribunales Superiores de Justicia que se han pronunciado sobre las antiguas cruces de los caídos es unánime al mantener que la ley de Memoria Histórica permite que se conserven estas cruces siempre que no conserven ningún vestigio de esta simbología originaria.
Por el momento, el ayuntamiento de Castellón está cada vez más cerca de iniciar la retirada de la cruz al licitar los trabajos por unos 80.000 euros. La intención del consistorio es recuperar el jardín original que había en el Ribalta hace 50 años.