El combate ocurrió en el distrito de Sayed Abad, en la provincia de Wardak, dijo a Efe Shahedulá Shahed, portavoz del gobernador provincial. Según explicó más tarde la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en un comunicado, una fuerza compuesta por soldados afganos y extranjeros fue objeto de un ataque de alguien “desconocido” en el transcurso de una operación y los militares “devolvieron los disparos”.
“Los informes iniciales indican que los disparos de armas cortas procedían de un puesto de combate del Ejército Nacional Afgano (ANA), y el apoyo aéreo pedido por la fuerza conjunta mató a al menos cuatro soldados del ANA”, reconoció la ISAF en la nota.
Según el portavoz afgano, las tropas afganas se encontraban en puestos de control recién instalado en los pueblos de Hasankhel y Akakhel, por donde regresaban las tropas extranjeras. “Trabajamos muy duramente para coordinar y sincronizar nuestras operaciones.
Este es un suceso lamentable y nuestro pensamiento está con las familias de los muertos y heridos”, indicó en el comunicado el portavoz de la ISAF.
El portavoz del Ministerio afgano de Defensa, Zahir Azimi, afirmó por su parte en la nota que la ISAF y el Ejército afgano comenzarán “una investigación conjunta para determinar las causas y circunstancias del suceso”.