La espada de Damocles cuelga sobre el comedor social ‘Yo Soy Tú’. Un préstamo de 125.000 euros y la “falta de ayudas” podrían ser el fin de esta asociación y el motivo de su cierre en diciembre. La ONG reparte todos los días un menú casero, compuesto por un primero, segundo, pan, postre y leche, a 1.865 personas, de las que un tercero son menores de edad, y un desayuno escolar (zumo o batido, bocadillo y fruta) para la hora del recreo a 600 niños y niñas.
En los seis años que lleva abierto el comedor la Junta ha puesto el 17 por ciento, el Ayuntamiento el 7 por ciento y yo el 75 por cientoEl covid, la actual crisis energía y la inflación han aumentado las colas del hambre. Antes de la pandemia atendían a unos 850 usuarios, pero ahora el número se “ha duplicado e incluso más”, cuenta Emilio González, presidente de ‘Yo soy tú’. A miércoles 5 de octubre son 1.865 personas, pero “cada día llegan más”.
A más familias, mayores son los gastos. Mantener abierto el comedor cuesta “20.000 euros al mes”, hay que pagar luz, agua, gas, gasolina para las furgonetas, alquiler y seguros. Al año, el coste económico es de “250.000 euros”.
Desde la apertura del comedor en 2016, Emilio ha ido poniendo dinero de su bolsillo para evitar el cierre, pero la situación ya es insostenible. “He pedido préstamos”, que ha avalado con su casa y bienes, y debe al banco 125.000 euros. Por ello, reclama a las administraciones públicas que arrimen el hombre. La subvención anual de la Junta de Andalucía es de 91.182 euros, cantidad “insuficiente”: “Hay asociaciones que tienen 150 o 200 personas y la Junta y el Ayuntamiento de Málaga les subvencionan con 160.000 euros. Creo que el reparto de la Junta no es equitativo”.
Las cuentas al presiente no le salen. En estos seis años que lleva abierto ‘Yo Soy Tú’, “la Junta ha puesto el 17 y pico por ciento, el Ayuntamiento el 7 por ciento y yo el 75 por ciento”. Con este “injusto” reparto de la carga económica, el comedor no hubiera podido llegar a 2022 sin la ayuda de los 72 voluntarios, de las donaciones de los socios, de asociaciones y colaboradores como Bancosol.
No quieren parar, por eso piden ayuda. Reparten alimentos de lunes a domingo, los “365 días del año”, especifica Agustín, cocinero en el comedor. Dan comida caliente a diario, pero además tienen un armario solidario en el que reparten ropa, calzado y mantas a quien lo necesita.
“La parte más fácil de aquí es hacer la comida”, explica, lo difícil es escuchar la historia personal de cada una de las personas, porque “se te cae el alma a los pies. Yo me he salido muchas veces llorando, porque ves a un matrimonio de unos 30 años venir a pedir comida para ellos con una niña pequeña y enferma en brazos”.
Familias y personas como estos padres “son lo que tenemos aquí, gente que no llega a final de mes”, dice Agustín, reivindicando que hay una “necesidad real, comer tiene que comer todo el mundo”. Los salarios “no llegan y con 30 euros no puedes comprar productos frescos en el supermercado, qué clase de dieta llevarían los niños y personas mayores que vienen”.
El trabajo empieza para los 72 voluntarios a las siete de la mañana y no paran hasta pasadas las tres del mediodía. Hay que repartir 2.000 menús diarios y 600 desayunos escolares en el barrio obrero de Bailén-Miraflores.
Durante la pandemia, este comedor social repartió 72.000 kilos de alimentos.
Administraciones
A través de un comunicado, el Gobierno andaluz ha negado “de forma taxativa falta de apoyo de la Junta a ‘Yo soy tú’”, justificando que desde el año 2020 la ayuda que destina a esta entidad ha pasado de 29.100 euros a 91.182 euros.
El Ayuntamiento no concede una subvención anual al comedor, aunque tal y como ha informado Emilio, durante la pandemia hubo una ayuda extraordinaria de cerca 18.000 euros y otra de 60.000 euros para la compra del local en el que tienen la cocina, con el que pudieron pagar dos terceras partes del importe.
Mañana el presidente se reúne con el concejal de Derechos Sociales, Francisco Pomares. Emilio cree que el Consistorio es “proclive a la negociación, espero que lleguemos a un acuerdo; pero la Junta de Andalucía es más dura, dice que los 91.000 euros son suficientes”.