La Fiscalía ha solicitado la pena de cuatro años de prisión para un preso que guardaba más de medio centenar de pastillas de tranquilizantes, así como diversas cantidades de cocaína y heroína en su celda de la prisión de Albolote (Granada), donde fue pillado dos veces con droga en la misma semana.
La Fiscalía le acusa de un delito contra la salud pública por el que también pide que sea condenado a una multa de 1.280 euros y que le llevará al banquillo de los acusados el próximo 13 de octubre en la Sección Segunda de la Audiencia de Granada.
Los hechos se remontan al 15 de diciembre de 2019, cuando, sobre las ocho de la mañana, los funcionarios de prisiones intervinieron al preso en su celda del módulo cuatro del Centro Penitenciario de Albolote un total de 53 pastillas, así como diversas bolsitas y un paquete de aproximadamente cinco centímetros de largo, según consta el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Europa Press.
Una vez analizadas estas sustancias se determinó que 38 de las pastillas eran de Diazepam y las otras 15 de Alprazolam. En cuento a la droga, el reo había ocultado en su celda seis gramos de heroína y medio de cocaína. La venta de todo ello en la prisión le hubiera reportado algo más de 600 euros.
Pese a esta intervención, el preso no desistió y dos días más tardes en otra intervención los funcionarios le encontraron en la celda de aislamiento a la que había sido destinado otras cuatro pastillas de un tranquilizante que también pretendía vender a terceros.
