Denuncian al Ejército birmano por una matanza de 30 personas cerca de la capital

Una milicia rebelde opuesta a la junta militar de Birmania denunció el asesinato de una treintena de personas, entre ellas tres religiosos, perpetrado presuntamente por el Ejército birmano en una población cerca de la capital.

La guerrilla Fuerza de Defensa de las Nacionalidades Karenni (KNDF, siglas en inglés) acusó el domingo a los militares de matar a 30 civiles durante el asalto a la localidad de Pinlaung, en el estado Shan y a unos 60 kilómetros al noreste de Naipyidó.

Conforme a las fotografías que publica en su perfil de Facebook el grupo rebelde, varios cadáveres aparecen entre charcos de sangre junto a la pared de un monasterio de la población, agujereada por lo que parece el impacto de las balas.

Según esta milicia de la minoría étnica karenni, las víctimas, entre ellas tres monjes budistas, se habrían refugiado en el recinto religioso tras la llegada el sábado de los soldados.

Esta matanza se produce después del asesinato de 15 personas, entre ellas tres mujeres, a principios de mes en una localidad de la región central de Sagaing, donde se han registrado feroces combates entre el Ejército y las guerrillas opositoras.

El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, condenó el pasado miércoles "los brutales ataques y asesinatos reportados en la región de Sagaing y otras partes del país" al expresar su preocupación "por la continua escalada de ataques indiscriminados por parte de las Fuerzas Armadas de Birmania".

El golpe de Estado perpetrado por el Ejército el 1 de febrero de 2021 ha sumido a Birmania en una profunda crisis política, social y económica y ha abierto una espiral de violencia con nuevas milicias civiles que han exacerbado la guerra de guerrillas que vive el país desde hace décadas.

Al menos 3.120 personas han muerto por la brutal represión ejercida por parte de las fuerzas de seguridad, que han disparado a matar contra manifestantes pacíficos y desarmados, y más de 16.400 permanecen detenidas, según los últimos datos de la oenegé birmana Asociación para la Asistencia de Presos Políticos.