La Audiencia de Málaga ha comenzado este lunes la selección del jurado popular que se encargará de enjuiciar a cuatro acusados de asesinar a dos hombres en 2018, uno de ellos a la salida de la comunión de su hijo en la localidad malagueña de Marbella. Está previsto que el juicio se inicie este martes y se prolongue durante más de un mes.
Según las conclusiones iniciales del ministerio fiscal, a las que ha tenido acceso Europa Press, estos cuatro acusados supuestamente actuaron de forma "directa y conjunta para acabar con la vida" de la primera víctima, siendo "los planificadores de tan ilícito propósito". Además, hay otros cuatro procesados por la supuesta colaboración en alguno de los hechos.
Para los cuatro principales procesados, la acusación pública solicita inicialmente la pena de prisión permanente revisable por dos delitos de asesinato y dos años de cárcel por otros dos de tenencia ilícita de armas. Para los otros cuatro pide 12 años de cárcel por un delito de asesinato en calidad de cómplices. Además, insta a que indemnicen a cada familia de las víctimas con 300.000 euros.
El primero de los asesinatos por el que serán juzgados fue en mayo de 2018, aprovechando que la víctima estaba saliendo con su familia de la iglesia donde acababa de celebrarse la comunión de su hijo. Según el ministerio público, cuando subía al coche, junto a su mujer, sus dos hijos menores y un amigo como copiloto, apareció por la parte delantera uno de los acusados.
Este iba vestido de negro y con casco integral oscuro, cuando presuntamente "empezó a disparar con una pistola automática de nueve milímetros parabellum de frente", realizando supuestamente, al menos, "cinco disparos que impactaron en su cuerpo y centros vitales" de la víctima, lo que le causó la muerte "de forma casi instantánea", dice el fiscal. No disponía de la necesaria licencia del arma.
El procesado huyó del lugar en una motocicleta, supuestamente solo utilizada para este crimen, y se dirigió a la urbanización donde uno de ellos había alquilado un piso, señala la acusación pública, quien apunta en sus conclusiones provisionales que este vehículo había sido comprado por uno de los acusados y traído desde Alemania por otros dos.
El segundo hecho por el que se les juzga ocurrió en agosto del mismo año, siendo, igualmente, los mismos cuatro acusados los que supuestamente "organizaron y planificaron de mutuo acuerdo" el asesinato de otro hombre, cuando este llegó a su domicilio en Estepona tras haber estado de madrugada con uno de los procesados.
En ese momento, presuntamente el mismo acusado que la vez anterior "salió a su encuentro, esgrimiendo una pistola automática nueve milímetros parabellum y comenzó a dispararle hasta nueve veces sobre el cuerpo y a corta distancia del mismo, impactando en sus centros vitales y causando su muerte de forma instantánea".
