Camps, que se pronunció de esta manera en la sesión de control de las Cortes, después de que la oposición recordara la decisión del Tribunal Supremo de reabrir el caso de los trajes que presuntamente le regaló la 'trama Gürtel', señaló que le gustaría ser "como el resto de los 45 millones de compatriotas a los que se les supone siempre la inocencia" e incidió en que el que acusa "es el que tiene que demostrar la acusación, que en este caso, no se ha demostrado nada de nada".
"Estoy siendo atacado porque soy el presidente de la Generalitat"; porque "soy el presidente de una comunidad que se puso en pie"; porque "soy el presidente de una comunidad ganando por dos mayorías absolutas" y "estoy siendo atacado porque no hay manera de ganarme si no es fuera de las urnas". "Por eso soy atacado", manifestó.
En este sentido, apuntó que la instrucción del caso "va a permitir que, por primera vez en todo el proceso, la defensa pueda aportar todos los datos que desmontan la acusación", ya que en el mes de julio "no llegó a tiempo" y el TSJCV archivó la causa. La instrucción que se abre ahora "da la opción por primera vez en el proceso" de "poder proponer las pruebas que desmontan la imputación", aseguró. Es "imposible que la verdad, en este caso como en todos, no triunfe" y "estoy convencido de que la verdad triunfará", apostilló.
El jefe del Consejo, además, afirmó que desde la oposición "son conscientes" de que "no sería el foco de atención como lo estoy siendo si fuese un presidente incapaz de ganar unas elecciones o esta comunidad fuese una comunidad de tercera o menor. Pero, da la circunstancia de que soy el presidente de una gran comunidad, un presidente que va a volver a ganar las elecciones, que las ha ganado dos veces" y "ya no saben cómo parar ni al presidente ni a la comunidad".
Camps subrayó que se siente "con más fuerza y más ilusión que nunca" y advirtió de que si se compara con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "con mucha más autoridad moral" y aseguró que llegará "hasta el final".
El portavoz del PSPV en la cámara, Ángel Luna, por su parte, aseguró que para Camps, la sentencia del TS "ha sido contundente, un varapalo brutal, lo vea o no lo vea" y añadió que está "más que imputado, está procesado como culpable de un posible delito". En este sentido, criticó que las reacciones del presidente han conseguido "abrir todos los informativos del país" pero también "todos los programas de humor".
Luna, además, acusó a Camps de "empobrecer a los valencianos" porque "ha puesto al Consejo a los pies de la trama, y le criticó porque frente al camino llevado por el proceso, la respuesta de Camps ha sido "arengar" a los suyos" y "desafiar" al sistema como si se tratara de una "conspiración mundial".
Luna aseguró que a Camps, en estos momentos "sólo le bastan las adhesiones incondicionales" pero "no las puede conseguir" y le pidió que "adelante el final de este tormento" porque ahora "sólo le sostiene Rajoy. No sé por qué, pero sólo le sostiene Rajoy", sobre quien están "concentradas todas las presiones de todos los barones de España que no quieren asociar la suerte a la suya", aseveró. "¿Cuánto va a tardar Rajoy en dejarle caer?", se preguntó.
En la misma línea, el portavoz de Compromís, Enric Morera, se preguntó si es por la sentencia del TS por lo que no viene el presidente del PP, Mariano Rajoy, al acto de sábado, organizado por el PPCV. Además, apuntó que Camps es un presidente regional al que "desde Madrid le pondrán o le quitarán" y que, incluso, "ha incumplido su propio código ético". Así, preguntó a Camps si va a "sentar en el banquillo de los acusados al presidente de la Generalitat".
El jefe del Consejo respondió que a él le sostiene "la verdad" y que con eso "se va a cualquier parte". "Llegaré hasta el final porque tengo razón y no he hecho nada irregular" y porque, además, afirmó que tiene el apoyo del grupo 'popular' en la Cortes, del PPCV y del PP nacional.
En relación a la ausencia de la oposición en el debate de ayer de reprobación a Luna, Camps le reprochó que, mientras él viene a las Cortes "cada jueves" a escuchar las "insidias e insultos" de la oposición, el síndic socialista "salió corriendo con el rabo entre las piernas".
Por otro lado, Luna criticó al jefe del Consejo por "poner en cuestión" a los encargados de la instrucción del caso de los trajes y le preguntó si los magistrados del TS "también están en la conspiración". Frente a esto, Camps respondió que él confía en los jueces, aunque insistió en que es "curioso" el caso del regalo "diez veces superior, no sé si 'opaco o Francisco' -bromeó-" a la presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, que comparó con el "supuesto regalo que nunca" se le hizo a él desde la trama.
En el turno de preguntas de Compromís, el síndic de la coalición, Enric Morera, apuntó que Camps, en lugar de escoger como referencia a Juan sin miedo, podría haber elegido a Pinocho, al que no le gustaba "hacer los deberes" y "así le iba". Además, apuntó que este proceso "no se abre por unas hienas bocheviques", sino por un "sastrecillo valiente".
Por su parte, el diputado de Compromís Josep Maria Pañella recurrió a la fábula del 'Nuevo traje del emperador', quien por vanidad, y tras ser engañado por unos pícaros, no reconoció pasear desnudo por la calle. El jefe del Consejo respondió que a Compromís "el cuento se les está quedando un poco largo" y están "durmiendo a los que pasan por su lado".
