Camps hizo estas declaraciones en el pleno de Las Cortes Valencianas, donde respondió a las preguntas de la oposición sobre la decisión del Tribunal Supremo de que se siga investigando la parte del caso Gürtel que le afecta por recibir regalos de la trama.
“Yo no sería el foco de atención si fuera un presidente incapaz de ganar unas elecciones o ésta fuera una comunidad de tercera”, dijo Camps, quien apuntó que la oposición ha encontrado en este proceso “un atajo” para evitar las urnas, que les generan “inquietud y ansiedad”.
El presidente valenciano dijo que le “sostiene la verdad, y con eso se va a cualquier rincón del planeta” y ha celebrado que el procedimiento que ahora se abre servirá para presentar “todos los datos que desmontan la acusación” y que no había podido alegar hasta ahora.
El president de la Generalitat ha afirmado que si se compara con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se siente con “más autoridad moral para seguir trabajando”, por lo que llegará “hasta el final” porque tiene “la razón” y porque no ha hecho “nada irregular”.
Ha insistido en afirmar que cuenta con el respaldo de su partido y de los ciudadanos y ha declarado que en este momento trabaja “más que nunca y con más ilusión que nunca para defender la verdad y acallar a aquellos” que han visto en el caso Gürtel “una oportunidad fuera de las urnas” para llegar a la Generalitat.
El socialista Ángel Luna le ha recriminado que siga “empeñado” en la “mentira y en la opacidad” sin que se le vea “propósito de enmienda” y ha lamentado que haya entrado en una política de “desafío público a todas las instituciones” con la excusa de que existe “una conspiración mundial” contra su persona.
Luna le ha acusado de “poner en cuestión” a todos los jueces que han pasado por su procedimiento, así como a los policías, fiscales, y a todas las “instituciones del Estado” y le ha recriminado que sostenga que el Tribunal Supremo ha dejado claro que no existe financiación irregular en el PP ni en el Gobierno valenciano, cuando no lo ha hecho porque “no trataba ese asunto”.
Camps, quien ha asegurado que confía en los jueces, ha afirmado que el portavoz socialista se encuentra en la “soledad” del que “lleva dos años insultando desde la tribuna a quien ha sido elegido democráticamente”, ante lo que Luna ha lamentado que califique de “insidia y de calumnias” sus preguntas sobre la gestión que ha hecho del dinero público.
“Si es tan valiente” ponga los contratos “encima de la mesa”, le ha retado, mientras que el president le ha recordado que lleva meses “aguantando” desde su escaño “insidias”, mientras que Luna ayer salió “corriendo con el rabo entre las piernas”, en alusión al abandono del hemiciclo por parte de la oposición cuando el PP debatía la reprobación del portavoz socialista.
El portavoz de Compromís, Enric Morera, ha afirmado que resulta “triste” para el prestigio de la Comunitat Valenciana que el president de la Generalitat “pueda sentarse en el banquillo” y ha añadido que si tuviera que compararlo con un cuento no lo haría con el de “Juan sin miedo”, como hizo Camps, sino con el de “Pinocho”.
Morera ha afirmado que la situación a la que se enfrenta Camps es “gravísima” ya que puede convertirse en el primer president de la Generalitat en ser juzgado y le ha invitado a cumplir con el código ético de su partido que prohíbe aceptar regalos, ante lo que el president ha pedido que se le respete la presunción de inocencia.