Los reyes de España, Felipe VI, y Holanda, Guillermo Alejandro, han respaldado este miércoles el proyecto para crear el primer corredor de hidrógeno verde de Europa, entre el sur, el puerto de Algeciras, y el norte, el de Róterdam, y que será un hito para la descarbonización del continente y para alcanzar su independencia energética.
Ambos monarcas, han participado en el Puerto de Algeciras en una jornada en la que las principales empresas vinculadas a este proyecto han firmado los acuerdos que permitirán su desarrollo: Cepsa y las multinacionales europeas Yara y Gasunie.
Con estas empresas, el hidrógeno verde producido en Andalucía llegará al puerto holandés, desde el que se podrá distribuir a través de hidroductos a industrias del centro y norte del continente.
Marteen Wetselaar, consejero delegado de Cepsa, ha subrayado que este será el primer corredor de hidrógeno verde de Europa, un “hito fundamental” de “un proceso irreversible” para conseguir “ecosistemas energéticos limpios”.
Ha explicado que, además de contribuir a la descarbonización del transporte marítimo y de las industrias del norte de Europa, responderá a la necesidad de Europa de ser independiente energéticamente que ha puesto sobre la mesa la Guerra de Ucrania.
En el acto, que ha contado con la presencia de la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, el ministro de Política Climática y Energética de los Países Bajos, Rob Jetten, el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, el presidente del Puerto de Algeciras, Gerardo Landaluce, y el director del Puerto de Rotterdam Internacional, René van der Plas, los monarcas han conocido los detalles del proyecto y se han fotografiado junto a uno de los barcos que formará parte de este corredor.
En el puerto de Algeciras se embarcará el combustible que Cepsa tiene previsto producir en el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde que está desarrollando en sus dos polos de Palos de la Frontera (Huelva), y San Roque.
Se trata del mayor proyecto de hidrógeno verde presentado en Europa, con una inversión de 3.000 millones de euros, la creación de 10.000 puestos de trabajo y una capacidad de producción de 300.000 toneladas de hidrógeno verde al año, lo que evitará la emisión de 6 millones de toneladas de CO2.
La compañía, que está desarrollando la ingeniería básica de los proyectos y la gestión de permisos, tiene previsto el inicio de la producción en 2026 en su parque energético de Palos de la Frontera (Huelva), más dedicado a la demanda local, y, en 2027, en el de San Roque. Según ha especificado el directivo de Cepsa, la inversión se estima en unos millones de euros para cada uno de los parques energéticos.
Además, en el Campo de Gibraltar Cepsa tiene previsto construir la mayor planta de amoniaco verde de Europa, con una capacidad de producción anual de hasta 750.000 toneladas, con una inversión cifrada en mil millones de euros y la creación de 3.300 puestos de trabajo, entre directos, indirectos e inducidos.
A esos tres mil millones de euros, se unen otros dos mil, para completar así los cinco mil millones anunciados para el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde. Esos dos mil millones irán destinados a las instalaciones para la producción de energía renovable para surtir a las instalaciones de generación de los combustibles.
“España, y especialmente Andalucía, tiene una gran oportunidad para liderar la transición energética”, ha subrayado el consejero delegado de Cepsa.
Ha explicado que España, como el sur de Portugal, por su sol, su espacio y sus estructuras de energía eólica, tienen unas condiciones ventajosas para producir más barato, hasta la mitad de precio, el hidrógeno verde.
Y ha asegurado que este corredor marítimo será complementario y no competencia al gaseoducto H2Med de “energía verde” que está proyectado entre Barcelona y Marsella.
“El gaseoducto no va a llegar a todos los lugares”, ha indicado tras explicar que el corredor por barco, aunque puede ser más caro, tendrá también que atender demanda de otros lugares de Europa y de otros países como Japón.
Tras su producción en el Valle Andaluz, la multinacional noruega Yara Clean Ammonia se encargará después de transportar en barcos desde Algeciras a Róterdam el amoniaco verde, un derivado en el que es convertido el hidrógeno verde porque es más sencillo de transportar ya que no requiere temperaturas tan bajas.
Y Gasunie, empresa holandesa líder en transporte e infraestructuras de gas, que conecta el Puerto de Róterdam con otros clústeres industriales europeos en Alemania, Holanda y Dinamarca, se encargará de distribuirlo a estos centros, una vez que el amoniaco verde es de nuevo convertido en hidrógeno verde.
El vicepresidente de Yara Clean Ammonia, Murali Srinivasan, ha subrayado que esta es “la primera vez que le mostramos al mundo una colaboración tan clara para acelerar la transición energética, estableciendo sus pilares para Europa”.
Por su parte, la vicepresidenta de Gasunie, Enmiendas Botter, ha calificado el proyecto como “sostenible y asequible” y ha subrayado que Países Bajos tiene “todos los ingredientes” para suministrar a otros hubs industriales de Alemania y Bélgica.
Según Cepsa, en 2050, el hidrógeno verde representará un tercio del combustible utilizado en el transporte terrestre mundial, el 60% del transporte marítimo y será decisivo para poder almacenar energía de un sistema eléctrico renovable.
El director del Puerto de Rotterdam Internacional, René van der Plas, explica que la producción de hidrógeno verde en el Noreste europeo es de carácter local e incapaz de alcanzar los precios que se dan en España. Su previsión es que este corredor permita surtir de 4,6 millones de toneladas anuales de hidrógeno verde en 2030 a la dársena holandesa.
Wetselaar considera que el corredor Algeciras-Róterdam es “compatible y complementario” con el H2Med, aunque sostiene que para ambos es necesaria “una industria suficiente como para llenarlos de hidrógeno verde”. Sobre el primero, entiende que serán necesarios de diez a quince años para completar las instalaciones de gasoductos, que requieren una enorme tramitación para construirlos desde Algeciras hasta Hamburgo (Alemania).
Además, entiende que además de esa infraestructura es necesario el transporte en barco, ya que además del suministro a Europa existen negociaciones actualmente con Japón y espera que en el futuro la demanda se extienda a otros puntos del planeta.
Sobre la inversión en el corredor Algeciras-Róterdam, asegura que Cepsa tiene un calendario bien definido y, si bien los fondos europeos son “necesarios, no vamos a esperarlos”, indica, de manera que lo ideal sería “hacerlos coincidir” con el desarrollo del plan.
El consejero delegado de Cepsa ha explicado en el acto que para cumplir con el compromiso de reducir en un 55 % los gases de efecto invernadero para 2030, se necesitan treinta proyectos del tamaño del Valle Andaluz de Hidrógeno Verde, el primero que verá la luz.
“El cambio climático no puede esperar, la descarbonización no puede esperar”, ha urgido.
Para ello, Westelaar defiende que Andalucía y el sur de Portugal son los lugares “más competitivo de Europa” para la producción de hidrógeno verde por sus condiciones para la producción de energías renovables. La producción de hidrógeno verde tendrá un precio de entre tres y cuatro euros por kilo, la mitad que en el Norte de Europa, ha cifrado.
Teresa Ribera ha subrayado que este proyecto pone de manifiesto “la credibilidad y la confianza que se tiene en España y en su sistema regulatorio” y el importante papel que el país tiene en la descarbonización de Europa. “España no debe perder este tren”, ha afirmado.
