Algo más de 600 kilómetros son los que separaban este miércoles dos hemiciclos: el Congreso de los Diputados y el pleno municipal. Uno en Madrid, el otro en Rota. En ambos, la Ley de Amnistía ha eclipsado ambos debates. Y es que los acontecimientos nacionales como es la sesión de investidura del candidato socialista, Pedro Sánchez, se ha hecho notar 600 km al suroeste en el Palacio Municipal roteño donde la tensión reaccionaria de esta última semana en las calles ha hecho mella durante la sesión. Si bien la investidura de Sánchez era inminente, las voces en contra han hecho lo posible por tener la última palabra tanto en las calles como en los espacios públicos reiterando el rechazo al acuerdo entre el PSOE nacional y los partidos independentistas.
Precisamente, sobre este asunto, el grupo municipal del Partido Popular presentó en el este pasado pleno ordinario una moción para subrayar que “España es una nación de ciudadanos libres e iguales en derechos y obligaciones” con el fin de que la Corporación Municipal “rechace cualquier proyecto que trate de romper la igualdad, que se pida un “gran acuerdo nacional” para la regeneración institucional, el Estado de Bienestar, y un pacto territorial que urja al Gobierno a que proponga un modelo de financiación autonómica que garantice los principios de igualdad” rechazando “cualquier privilegio unilateral al margen del acuerdo entre todas las CCAA” y, por último, que el pleno reclame al Gobierno que garantice un marco de financiación de Ayuntamientos, Diputaciones y Cabildos “basado en la suficiencia, la solidaridad y la equidad”.
Una moción con claro carácter nacional, que ha enmendado el PSOE y que finalmente ha derivado en abordar la Ley de Amnistía, clave en el acuerdo de gobierno entre PSOE y Junts Per Catalunya, y sobre la cual, el PP no mencionó en su moción, pero sí, al inicio de la intervención de Nazareth Herrera, mostró su intención de abordar aunque en la propuesta no se mencionara. Era cuestión de tiempo que fuera introducida en el debate, sumado a que, entre el público, un grupo de ciudadanos portó un cartel de grandes dimensiones en el que podía leerse “Rota contra la Amnistía”, sobre un fondo rojigualdo de la bandera nacional.
Desde el principio de la exposición del punto, el primer edil pronunció varias llamadas de atención a los asistentes -ante un número bastante mayor de público del que suelen acostumbrar las sesiones plenarias-, para guardar silencio y respetar las correctas y legibles exposiciones de los distintos grupos.
El PSOE apoyó en su mayoría presentando enmiendas de sustitución apuntando que “la convivencia democrática ha tenido muchas amenazas durante esta etapa histórica de libertades y que se han podido ir sorteando con el mantenimiento de nuestras instituciones, el diálogo entre personas que opinamos de distintas formas y respetando las formas democráticas que impiden declarar legítimo un poder del Estado cuando este se conforma en los términos marcados por la constitución” incorporando también que la convivencia democrática “no está exenta de desafíos y, concretamente, en los últimos días hemos podido ver manifestaciones violentas haciendo apología al franquismo que denunciamos desde el pleno” y, por último, que el trabajo de mantener la convivencia democrática lo garanticen no solo las fuerzas políticas mayoritarias sino todas las del arco parlamentario. Manrique le preguntó directamente a la concejal popular si estaba de acuerdo con las enmiendas, y afeó que el grupo conservador “no votara en contra del reparto desigual de la Diputación” en el anterior pleno por ser “repartos arbitrarios que perjudican a Rota” así como que en los Presupuestos Andaluces 2024 no apareciera inversiones para Rota: “Esto es desigualdad”.
Desde la coalición de IU+Podemos, su portavoz, Pedro Pablo Santamaría señaló que el PP también había beneficiado a personas en lo correspondiente a más de 31.000 amnistías fiscales.
El portavoz del PSOE, Daniel Manrique, afeó a la popular presentar una moción “y ahora querer hablar de otra cosa” y dijo que estos proponían una ley de financiación “justa para Andalucía” como la que apoyó el Parlamento Andaluz en 2018. A esto, la concejal popular insistió en hablar de actualidad política manifestando la posición contraria de su grupo a la Ley de Amnistía por “perdonar 15.000 millones de euros a la comunidad que intentó hacer un referéndum separatista” perdonándose una deuda a una comunidad “que no ha cumplido la ley durante 11 años y aquellos que intentaron romper España”. Esta criticó que la consulta a la militancia del PSOE no preguntara sobre el apoyo a la Ley de Amnistía, sino sobre los acuerdos con “Sumar y otros partidos” y concluyó: “No vamos a permitir que vendan España por siete votos”.
No obstante, tanto el PSOE como IU+Podemos, destacaron la evidencia de que, durante la defensa del grupo popular, se habló de la Amnistía cuando esta “no viene” en el texto principal propuesto por el grupo. El primer edil, Javier Ruiz, llamó la atención en este sentido a los populares aunque, apuntó, como responsable al frente de la cámara, había decidido que prosiguiera el debate teniendo en cuenta el contexto: “Mejor así a que digan que impedimos el debate libre y democráticamente”. Santamaría subrayó que: “Es una falta de respeto a la institución y un incumplimiento del ordenamiento orgánico”.
Para cerrar el debate, Ruiz Arana apostilló que la realidad era una: “La investidura saldrá adelante con 179 escaños que representan a 12 millones de españoles que han votado que son igual de españoles que otros. Una moción enmendada que terminó contando con el rechazo del grupo que la presentó, el PP, así como el de Vox y el apoyo del PSOE e IU+Podemos. “El PP acaba de votar en contra de la igualdad”, concluyó el regidor para poner fin al debate.