Para intervenir cuando sea necesario. Para diagnosticar a nuestro alrededor y para pedir ayuda. De sensibilizar trata el 25 de noviembre, el día para visibilizar que hay mujeres que siguen siendo asesinadas en un porcentaje evidentemente mayor que otras violencias, aunque muchos insistan en comparar.
Pero son más las voces de repulsa las que se han escuchado esta semana en torno a este día en toda España, en concreto, también en Rota, donde una manifestación ha recorrido el centro de la localidad secundada por alrededor de doscientos participantes, mujeres y hombres, niños y adultas.
A la misma han asistido el equipo de gobierno, representado por el alcalde de Rota y miembros del mismo, así como la Corporación Municipal con representantes de los grupos municipales de la cámara local como PSOE, Partido Popular IU+Podemos salvo la representación de Vox, que horas antes anunció su ausencia. Además, miembros de otros partidos así como asociaciones, colectivos y vecinos y vecinas también han participado en la convocatoria siendo multitudinaria. Entre los asistentes a esta manifestación, ha destacado especialmente la presencia de niños y niñas, nuevas generaciones que van creciendo con el mensaje de la igualdad muy presente.
Una manifestación que ha sido bastante participativa porque, esta ha ido acompañada por simbología feminista basada en la coeducación y en la implicación de los más jóvenes en los centros educativos así como del tejido asociativo. Varios manifestantes portaron una pancarta basada en un puzzle, que había sido conformado por los alumnos de los colegios e institutos de Rota en línea con el lema de la campaña de la delegación municipal de Igualdad de este año: “Uniendo piezas contra la violencia machista”. Así, un gran lazo de croché elaborado por vecinas en el taller de “Tejiendo en igualdad” ha cerrado la marcha, sin olvidar la primera pancarta que ha sido sujetada durante todo el recorrido por el alcalde de Rota, Javier Ruiz, y representantes de distintas asociaciones de mujeres de la localidad.
En el inicio, desde la plaza Jesús Nazareno, la delegada de Igualdad, Laura Almisas, explicó el formato de esta manifestación que no era al uso, ya que seguiría una estructura basada en “Las estaciones de la violencia”, es decir, recorrería simbólicamente el sufrimiento de una mujer víctima de violencia machista pasando por el miedo y el dolor, el recuerdo a las víctimas y la salvación.
Con el lazo negro, y el encendido de una vela del mismo color por la delegada de Igualdad, ha comenzado esta marcha desde la plaza frente a la Costilla con una performance interpretada por la asociación Mujereando, mujeres víctimas de violencia de género sin hogar. Con la emoción transmitida por estas actrices expresando el terror que abruma y lleva intrínseca esta violencia, ha emprendido la marcha hasta llegar a la plaza de la Merced, ubicación de la segunda etapa, correspondiente al lazo morado. Allí, se han encendido 52 velas en recuerdo de las mujeres asesinadas en lo que va de año víctimas de violencia machista en nuestro país. La primera de ellas, la ha encendido el alcalde y acto seguido, mujeres de las asociaciones Bicocas, Mujeres Feministas de Rota, Ademur, Arofi, Mujeres Ante El Mundo y de la Asociación de Personas con Discapacidad de Rota, han leído el manifiesto contra esta lacra aprobado en el último pleno municipal con motivo del 25N, también aprobado por las diputaciones andaluzas. Después, se encendieron el resto de velas y se colocaron junto al lazo morado en recuerdo de estas víctimas portadas por diferentes colectivos.
La educación en perspectiva de género, la creciente concienciación y el compromiso por el incremento de los esfuerzos para la atención a las víctimas, la implicación en el ámbito rural, el acompañamiento a las víctimas, la mejora de la detección de la civerviolencia, y la violencia sexual grupal teniendo en cuenta la interseccionalidad de las mujeres así sin olvidar la atención a los jóvenes fueron algunos de los puntos a destacar en este manifiesto.
Por último, la estación final fue la dedicada con una vela y lazo blanco a la esperanza y a un futuro mejor donde la erradicación de la violencia de género sea una realidad. Una vez a las puertas del Castillo de Luna, Vanesa encendió la vela blanca, una mujer superviviente de violencia de género.
Un problema que “no deja de crecer” y para el cual, el primer edil, pidió la empatía suficiente a la sociedad roteña para ser conscientes de la gravedad del asunto y que no haya ni una mujer más que pierda la vida a manos de hombres. Así, estas manifestaciones sirven, apuntó, para “informar, educar y compartir” para mantener presente el grave problema de los feminicidios que “no son cifras, sino mujeres con nombres y apellidos, vidas truncadas”. Aprovechando la presencia de niños y niñas en la marcha, el alcalde destacó que era importante trabajar en coeducación como venía haciendo el Ayuntamiento en los itinerarios formativos escolares porque, desde pequeños, es necesario enseñarles a “destruir estereotipos y a cuestionar normas patriarcales” con las que todos hemos crecido. Sin embargo, ante “el retroceso que puede observarse en etapas de la juventud”, hay que dar un paso al frente para alcanzar una sociedad feminista, reseñó, siendo “urgente contrarrestar este fenómeno con actividades de concienciación sobre el uso de las plataformas” educando en la responsabilidad de construir un futuro “libre de violencia”. Una responsabilidad que “recae en cada uno de nosotros” para que no haya “ni una mujer menos”.
Para cerrar el acto, las actrices de la asociación Mujereando volvieron a cautivar al público con su performance en la que cada una, ha contado cómo una mujer sumida en la violencia de género se siente invisible ante la sociedad en general y sin recursos reales al alcance para buscar una alternativa y salvarse. “Algunas veces me gustaría salir corriendo, muy lejos donde tú no me encontraras y otras me muero si no te tengo a mi vera. Absurda, torpe, insignificante y a veces pequeña, triste, asustada, confundida. Muchas veces invisible”, expresaba una de ellas. Una interpretación abrumadora y miy emotiva a la vez que de auténtica dureza, que ha pretendido poner a los manifestantes en la piel de la víctima de violencia machista. “¿Nadie se da cuenta de que necesito ayuda? Que alguien me tome de la mano pero no del cuello. Siento que mi corazón está dejando de latir. Siendo que me voy. ¿Nadie se da cuenta de que a esta muñeca de papel la estan matando?. Invisibles el dolor es un secreto que los ojos no saben guardar”.
La presencia de la asociación de las mujeres víctimas sin hogar, sirvió para poner encima de la mesa la interseccionalidad del movimiento feminista donde, debido a la especial vulnerabilidad de estas mujeres el machismo azota con más fuerza y es que la violencia machista es una de las causas más frecuentes de las mujeres sin hogar porque, una de cada cinco mujeres en la calle están en esa situación por haber sufrido maltrato machista según el INE. En concreto, todas las mujeres que conforman esta asociación de mujeres sin hogar, habían sufrido violencia machista en sus anteriores hogares o en las calles.
A fecha de hoy, son 1.237 víctimas mortales las contabilizadas por violencia de género desde 2003 siendo investigada como tal la última mujer hallada asesinada el pasado jueves 23 de noviembre en la localidad gallega de O Porriño. En España en lo que va de año son 52 las mujeres que han perdido la vida a manos de sus parejas o exparejas y de ellas, 17 asesinatos fueron en Andalucía, siendo la comunidad con más feminicidios del país. Los datos casi alcanzan los del último año más negro para las mujeres, el pasado 2019 cuando fueron asesinadas 53 víctimas a ocho de noviembre de ese año. El último caso confirmado de violencia de género fue una mujer de 39 años, presuntamente asesinada por su cónyuge (en fase de ruptura) en Madrid el pasado 4 de noviembre.