El resultado de las primeras investigaciones "de inicio nos da la idea que es un enfrentamiento entre algunas bandas criminales" y que podría haber "algún negocio ilícito en medio de todo", declaró a la prensas el viceministro hondureño de Seguridad, Armando Calidonio.
"Hay indicios racionales que nos indican que miembros de la Mara 18 con un grupo de la banda de Los Tercereños son los que operaron en ese lugar", explicó.
La Mara 18 es una de las pandillas más violentas que operan en Honduras y otros países centroamericanos y vive en permanente disputa por el control de territorios y negocios como la venta de drogas con la Mara Salvatrucha, su principal rival.
Según la Policía, unos nueve hombres con chalecos antibala y pasamontañas llegaron en dos vehículos al campo de fútbol de la colonia Felipe Zelaya de San Pedro Sula (norte), sacaron varias armas de otro automóvil estacionado en el lugar y dispararon contra las víctimas.
Nueve personas murieron de inmediato, cuatro cuando eran llevadas a un hospital y una más en el centro asistencial.
Las autoridades recogieron en el lugar de la masacre unos 35 casquillos de fusiles AK-47 y M-16, y de pistola nueve milímetros.
Calidonio refirió que los autores de la masacre llegaron al lugar "buscando a una persona de nombre Froilán", quien supuestamente resultó herido aunque se desconoce su paradero.
El viceministro aclaró que las investigaciones indican que "no toda la gente que murió estaban involucradas con una banda, posiblemente muchas de las personas podrían no tener nada que ver" en cuestiones delictivas, lo que se espera confirmar una vez que todas estén plenamente identificadas.
"Una situación como ésta no puede dejar de hacernos pensar en un probable ajuste de cuentas", señaló el viceministro de Seguridad.