La Unidad de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria ha llevado a cabo dos importantes intervenciones en Sevilla, resultando en la confiscación de 419 kilogramos de tabaco picado y 5.170 paquetes de cigarrillos de contrabando, culminando en la detención de tres individuos por su presunta implicación en estos actos ilícitos.
La primera de las operaciones consistió en el desmantelamiento de un centro clandestino de picadura de tabaco en la localidad sevillana de Los Palacios y Villafranca. La operación, denominada 'Semilla', se inició en el mes de enero, al detectar los agentes de la Unidad Operativa de Sevilla "movimientos sospechosos" de varios individuos en una nave del municipio, según informa en una nota de prensa.
Con el avance de las investigaciones, se pudo identificar a los presuntos responsables de los hechos investigados, quienes acudían regularmente al centro de picado. El pasado 7 de febrero se estableció un dispositivo para la interceptación de estos individuos, dando como resultado la aprehensión de 384 kilos de picadura de tabaco, ya envasada y dispuesta para su venta en bolsas de un kilo, así como toda la maquinaria necesaria para la manufacturación de la mercancía.
Fruto de la operación, fueron detenidas dos personas, si bien la investigación continúa abierta, por lo que no se descarta que se produzcan nuevos arrestos en los próximos días.
Por otro lado, el segundo operativo se ha desarrollado en dos fases, dentro de la denominada operación 'Dominic'. La primera fase tuvo lugar dos días después, el 9 de febrero. Los agentes constataron que un vecino de Utrera transportaba mercancías ilícitas en su vehículo, por lo que se le dio el alto y se procedió al registro del turismo, donde se encontró un total de 2.350 cajetillas de tabaco, que acarreó una fracción administrativa.
Tras continuar con las investigaciones y vigilancias sobre el mismo individuo, el pasado 12 de febrero se realizó la segunda fase de la operación, cuando se le interceptó circulando con otro vehículo en el que transportaba 1.360 cajetillas. Acto seguido, se realizó un registro en su domicilio, que utilizaba como almacén, y se intervinieron otras 1.460 cajetillas; así mismo, se intervinieron 35 kilos de picadura y diversa maquinaria para la fabricación y elaboración del tabaco.
El balance total de la citada operación ha sido la incautación de 5.170 cajetillas de tabaco y 35 kilos de picadura. Además, el individuo responsable del contrabando ha sido detenido por la presunta comisión de un delito continuado de contrabando. Todos los detenidos han sido puestos a disposición del Juzgado de Utrera, en funciones de guardia.