En un mundo donde la reverberación de la conciencia ambiental resuena cada vez más fuerte, surge una nueva ola de innovación. Iván Marmolejo y Jose Rojas, dos visionarios jóvenes oriundos de Málaga, están liderando esta revolución. Su empresa, bajo el nombre de 'Plash', pretende redefinir este concepto desde un producto tan común como el café.
Lejos de los cubiertos convencionales, 'Plash' ofrece una experiencia completamente nueva: cubiertos comestibles para el café. Estos ingeniosos utensilios no solo son una solución al problema de los desechos plásticos, sino que también abren las puertas a un mundo donde cada bocado se convierte en un gesto de protección hacia nuestro planeta.
Con un enfoque en la gastronomía como catalizador del cambio, Marmolejo y Rojas están en una misión para transformar la manera en que disfrutamos de nuestras bebidas favoritas. Inspirados por un viaje a Costa Rica, donde exploraron las maravillas de los cafetales y se sumergieron en su cultura decidieron emprender en este campo tan prometedor.
El viaje de 'Plash' hacia la creación de sus cubiertos comestibles no ha sido fácil. "Requirió dedicación y mucho trabajo", como los mismos protagonistas reconocieron en una entrevista concedida a 7TV Málaga.
Sin embargo, el resultado final es más que una simple innovación: es una declaración de principios. Estos cubiertos, con su sabor a vainilla y su composición vegana y sin gluten, son un testimonio vivo de que la sostenibilidad puede ser deliciosa.
El impacto de 'Plash' ya se está sintiendo en las cafeterías de Málaga. Son ocho los establecimientos que ya han tienen a disponibilidad de sus clientes estos cubiertos, demostrando un compromiso palpable con el medio ambiente. "La respuesta ha sido inceríble, con clientes entusiasmados por la idea de disfrutar de su café sin dejar un rastro de residuos" apunta Iván Marmolejo.
Si bien 'Plash' ha comenzado su viaje en Málaga, su visión se extiende mucho más allá. Marmolejo y Rojas tienen la mira puesta en la expansión nacional e internacional. Sueñan con un mundo donde cada café se sirva con un toque de conciencia ambiental, donde cada empresa y consumidor se sume a la causa de una revolución sostenible.
Ahora mismo tienen claro que quieren explotar la rama del café... aunque no descartan nada para el futuro: "Ahora mismo hay que intentar hacerse un hueco en el mundo, estar cada vez más establecimientos. En el futuro claro que nos podríamos plantear tener una variedad más amplia de cubiertos".
El futuro de Plash es prometedor. Con cada café servido, están escribiendo un delicioso capítulo nuevo en la historia de la sostenibilidad. Un servidor ha tenido la oportunidad de probarlos y da fe de que están riquísimos. Su mensaje es claro: el cambio comienza en nuestras manos, o más precisamente, en nuestros cubiertos.
