En declaraciones a la Ser recogidas por Efe, Bono se ha referido así al encuentro que mantuvo el pasado miércoles con el jefe del Ejecutivo en la Cámara Baja y que despertó un gran interés por parte de los medios de comunicación.
Tras comentar que tomaron un café "sin más" y hablaron de la familia, de la política, del Parlamento o de las elecciones, Bono ha señalado que la conclusión que extrajo del encuentro, la que ha llevado a su diario y ha contado a sus hijos es que "tenemos un gran presidente del Gobierno" y "detrás del presidente hay un hombre digno de ser valorado".
"José Bono, desde que Zapatero le ganó el Congreso en el 2000 no se ha permitido ni se permitirá el más mínimo regate en su contra porque Zapatero se va a engrandecer cuando ya no sea presidente del Gobierno", ha precisado el presidente del Congreso antes de matizar que los sacrificios de Zapatero "el pueblo español los va a reconocer".
Según Bono, en un momento de crisis, con "ajustes difíciles y complicados, con una izquierda a nuestra izquierda que pareciera otra vez instalada en la pinza y con unas duras críticas como las que está recibiendo, es comprensivo que se duela y que su imagen esté mal".
A pesar de ello, Bono ha recordado la última encuesta del CIS, en la que Zapatero tiene una valoración del 3,4 de 0 a 10 frente al 3,3 que tiene Rajoy, por lo que ha comentado que "las cosas no están para tirar cohetes, ni unos ni otros", y en referencia a las elecciones ha comentado que "hasta que no pasa el último santo no acaba la procesión".
Bono también se ha referido a las críticas que ha recibido su reciente visita a Guinea Ecuatorial y en concreto a la frase que dirigió al presidente de aquel país, Teodoro Obiang, a quien dijo: "son más las cosas que nos unen que las que nos separan".
Ha aclarado que lo que dijo es que "lo que une a Guinea y a España, a la sociedad guineana y a la española, en cultura, en educación, en lengua, es mucho más que lo que nos separa", y ha añadido, en tono crítico, que "para algunos exquisitos allí son negros y aquí somos blancos, incluso para algunos los dictadores que tienen un color de piel son más llevaderos".
En este sentido, ha comentado que no entiende el cinismo de algunos "con unos dictadores y no con otros", y ha recordado que "hay quienes en la dictadura de Pinochet escribían libros a favor del dictador que no han sido recriminados", por lo que ha pedido "menos cinismo y más rigor".
