La crisis económica ha servido de excusa para algunos gobiernos del PP para plantear retrocesos sociales, tales como la propuesta planteada por las Comunidades de Murcia y Madrid para establecer el copago sanitario en los servicios de sanidad y educación. En Murcia, el presidente Ramón Luis Valcárcel ha ido más allá y ha advertido que si la Comunidad no recibe la financiación suficiente no dudará en renunciar a las competencias en política sanitaria y educativa, a pesar de que esta propuesta es considerada inconstitucional.
El PP siempre ha mantenido un programa oculto, pero de vez en cuando, determinados dirigentes han enseñado la patita y han demostrado sus verdaderas pretensiones respecto a derechos tan básicos para nuestro Estado del Bienestar.
La fórmula de copago sanitario vendría a sumarse al conjunto de medidas de carácter restrictivo emprendidas en éstas y otras comunidades autónomas, como la privatización de determinados servicios en Educación y Sanidad, que obligan a los ciudadanos a pagar por recibir asistencia sanitaria o llevar a sus hijos al colegio.
Por ello, el Grupo Socialista ha defendido una propuesta en el pleno del Ayuntamiento de Jerez para que se mantenga la gratuidad y el carácter público de la sanidad y la educación en Andalucía, rechazando de plano fórmulas como el copago, que se plantean en otras Comunidades Autónomas, como Madrid o Murcia, y que se garantice la sostenibilidad de nuestro actual sistema sanitario y educativo, potenciando una mejora constante de la calidad de los servicios. El PP evitó el debate al plantear una enmienda a la totalidad, a pesar de que sus dirigentes ya se han pronunciado favorablemente sobre la fórmula del copago. Por eso desde el PSOE apostamos por garantizar la prestación de unos servicios públicos tan necesarios como la sanidad y la educación. Lo contrario, sería un retroceso y un auténtico varapalo al mantenimiento del Estado de Bienestar que tantos años nos ha costado conquistar, un logro que se ha visto reforzado con las políticas socialistas y los gobiernos socialistas.