“Ernesto Marín quiere seguir batiendo récords de ser el alcalde más dañino que ha existido para Chiclana en toda su historia. No tuvo bastante con paralizar, a diferencia de lo que ocurre en San Fernando o Cádiz, el tranvía, esto es, una inversión de casi 40 millones de euros y la generación de cientos puestos de trabajo; no le fue suficiente con dejar abandonado el proyecto de promover terrenos para la instalación de industrias; no le ha importado ningunear al pleno, faltando a los mínimos principios democráticos, actuando con el “aquí mando yo”; no fue bastante para él retrasar el proyecto de Sancti Petri, que ya podía estar en marcha, generando cientos de empleos... ahora le ha tocado el turno al Museo del Vino y la Sal", dicen los socialistas.
“Independientemente de que se trata de una instalación que puede significar un impulso para el turismo de la ciudad, para el centro; que genere varios puestos de trabajo y que su funcionamiento se autofinanciara, en este caso duele especialmente por tratarse de un ataque directo a las raíces culturales e históricas de Chiclana, especialmente vinculadas con estos dos sectores. Había cientos de personas ilusionadas con este proyecto, trabajando desinteresadamente desde hace años. Da pena ver en qué ha convertido Marín el lugar donde se habían vertido tantas esperanzas: en un simple almacén”.
Para el PSOE es “muy triste” que se prescinda de su coordinador, “que ha desempeñado, con su equipo de colaboradores, un enorme trabajo”. “Es precisamente ahora, en la recta final, cuando había que realizar un esfuerzo para poner en marcha el trabajo teórico desarrollado durante los meses anteriores. Solo las obras ya iba a significar la creación de varios puestos de trabajo”.
Desde el PSOE, mientras tanto, se sigue esperando con “enorme expectación y deseos” el gran proyecto anunciado por Marín hace meses, “el de la ciudad en miniatura”. “Como todos sabemos y reconocemos, se trata de una iniciativa que, además de estar ligada estrechamente con Chiclana, vendrá a resolver todos sus males turísticos y económicos. Por lo visto, la empresa es de gran altura, puesto que Marín lleva nueve meses volcado con ella y todavía nadie sabe nada al respecto”.