Una audiencia media de 358.000 espectadores siguieron el debate, lo que para Griñán supone el "mayor mitin" de una campaña electoral, por lo que ha asegurado que se sintió "cómodo y bien" aunque tenía la impresión de que le faltaba "algo, alguien que no dio la cara".
Ha defendido los debates televisivos y el derecho de los ciudadanos a tenerlos, una "obligación estatutaria", ha recalcado Griñán, quien ha acusado a Arenas de "faltar al respeto" de los ciudadanos por su negativa a comparecer y ha subrayado: "No da la cara defendiendo a Andalucía".
Por su parte, Valderas ha asegurado que se siente ganador del debate ante la gente que quiere representar, aunque ha matizado que "son los ciudadanos" quienes tienen que juzgar el resultado.
Ha criticado que Arenas "ha huido" y "ha corrido en contra de las cámaras de televisión públicas, de todos los andaluces", y lo ha hecho porque "no era capaz de mantener un discurso que le llevaba a decir si estaba a favor o no" de la reforma laboral, las privatizaciones y el aumento de los parados.
En este sentido, Arenas ha reiterado que no acudió al considerar que había falta de neutralidad en la televisión andaluza y ha asegurado que estaba pactado que se celebrara en el Parlamento autonómico, reiterando su argumento de que quiere debatir hasta que finalice la campaña e incluso después de ella.
El Consejo Profesional de Canal Sur Televisión, que representa a los redactores y realizadores de la empresa pública, ha rechazado esta justificación y ha defendido la imparcialidad de los profesionales en el tratamiento de la información.
Por otra parte, en un acto en Sevilla, Griñán y los líderes regionales de la UGT, Manuel Pastrana, y de CCOO, Francisco Carbonero, han pedido a los ciudadanos que reaccionen contra el "retroceso" social y laboral del modelo económico del PP, y se han comprometido a renovar la concertación social.
La libertad sindical, la negociación colectiva, la concertación, la defensa del empleo y la apuesta por un modelo social han sido las promesas que Griñán ha renovado con los sindicatos, a los que ha garantizado la defensa de la educación y la sanidad públicas.
En Barbate (Cádiz), Arenas se ha comprometido a que si gobierna tras las elecciones reducirá los actuales 25 delegados provinciales de la Junta a siete.
Además, pondría en marcha un Plan Integral para Barbate, en el que habría una apuesta decidida por el mantenimiento del sector pesquero.
Valderas, que se ha reunido hoy con profesionales sanitarios del Hospital Carlos Haya de Málaga, se ha mostrado a favor de una modificación "de común acuerdo" del Estatuto de Autonomía para "garantizar que no habrá recortes en servicios fundamentales".
Ha apostado por un "gran pacto" para que las políticas de salud, educación, dependencia y servicios sociales "no se vean recortadas".
