La concejal de Medio Ambiente, Marta Rodríguez, informa de que el número de usuarios que esta Feria de Primavera y Fiesta del Vino Fino ha sido de 52.565 viajeros menos respecto al año anterior, lo que supone el 77,40%.
Un dato que es reflejo, señala la edil popular, de la reducción en el servicio que estaba cumpliendo los mínimos establecidos por la Junta de Andalucía al encontrarse los trabajadores de la UTE Daibus en huelga.
En total, el número de usuarios que han utilizado el autobús urbano ha sido de 15.353, es decir, lo han usado el 22,60% de las personas que lo utilizan habitualmente para acudir o regresar de la Feria. “Una reducción en el número de usuarios que repercutirá directamente en las arcas municipales, y por tanto, en el bolsillo de todos los portuenses”, insiste en recalcar la edil. Coste que además se suma al destrozo que han padecido algunos autobuses durante los días de Feria.
Rodríguez insta a empresa y trabajadores a que se sienten a negociar, recordándoles que esta merma en el número de usuarios y en las condiciones del servicio afectan directamente al contrato municipal.La edil aclara que el sistema de gestión de este contrato es compartido, es decir, la subvención que el Ayuntamiento da para el servicio obligatorio de transporte de pasajeros dependerá finalmente de la liquidación anual, que se hace compensando los ingresos que hay por la venta de billetes. “Por lo que la bajada considerable de usuarios, en el pico más alto de afluencia que es la Feria, a quien perjudica es a los propios ciudadanos, ya que tendrán que seguir equilibrando con sus impuestos el déficit que se ha producido”.
Además, la responsable de Medio Ambiente espera que este conflicto laboral se resuelva cuanto antes por el bien de todos los portuenses, reiterando que esta situación repercute negativamente en los ciudadanos y en el servicio que se presta a los mismos, y más en unos momentos económicos tan delicados.
Reflexión
Marta Rodríguez aprovecha el balance para hacer una reflexión en voz alta, “a la larga este tipo de movilizaciones perjudica al uso diario de este servicio básico para la movilidad. Se constata que se pierden pasajeros no sólo durante la huelga, sino que también el resto de días. Viajeros que después cuesta recuperar, ya que los usuarios, ante la incertidumbre que se crea, empiezan a buscar otras formas de desplazamiento al margen de los autobuses urbanos”, explica.
Por tanto, “la pérdida de viajeros es negativa para todas las partes implicadas, también para los trabajadores, puesto que si hay menos demanda habrá que equilibrar servicios y horarios”.
Una situación que de hecho ya ha pasado en Jerez, apunta, una ciudad con cinco veces más pasajeros que los que se registran en la localidad. “Tras más de seis mese de movilizaciones, los ciudadanos ya no se acuerdan de los autobuses urbanos, han aprendido a vivir sin ellos”, por ello adelante que puede ocurrir lo mismo en el municipio.