La unión de una empresa bodeguera, Delgado Zuleta, y una especializada en el sector turístico, Sanlúcar Descúbrela, ha permitido poner en marcha en Sanlúcar el primer Centro de Interpretación del Vino del Marco de Jerez. El objetivo principal de este proyecto, que ayer fue inaugurado por la alcaldesa de Sanlúcar, Irene García, el presidente del consejo de administración de bodegas Delgado Zuleta, José María Bustillo y la gerente de la empresa Sanlúcar Turística, Eva Buzón, es transmitir el legado patrimonial y cultural del vino al gran público con actividades de carácter didáctico. “Aquí se le va a enseñar y provocar el interés a todo el que acuda a este centro”, apuntó Bustillo.
Con este Centro de Interpretación se pretende fomentar el turismo del vino o enoturismo como una buena oportunidad para diversificar y desestacionalizar la oferta, tanto en el mundo del vino como en el turismo, aprovechando una denominación de origen que cuenta con su propia cultura del vino: historia, tradición, diversidad, métodos de elaboración singulares y un territorio, su origen, que justifica su existencia y que permite ofrecer al consumidor o al enoturista una serie de opciones que son mucho más que una simple visita a una bodega.
Una de las peculiaridades del centro, abierto a visitantes de todo tipo y de distintas edades, es que está ubicado en el interior de una bodega, lo que permitirá al visitante envolverse de los aromas del vino en una visita que conjuga, además del conocimiento, la puesta en marcha de varios sentidos. El aroma, el gusto y el tacto tendrán un especial protagonismo en la visita que realicen al Centro de Interpretación del Vino, que ha sido equipado, en una primera fase, con varios paneles informativos que van ofreciendo al visitante información desde el origen de la Manzanilla -permitiéndoles poder tocar incluso la tierra donde se cultivan las vides que producen la uva palomino- hasta su proceso de fermentación con el velo de flor y su posterior trabajo a cargo de los enólogos para realizar las correspondientes sacas y proceder al embotellado final. “Lo que queremos es interactuar con el visitante”, señala Eva Buzón, responsable de la empresa Sanlúcar Descúbrela que ya ha puesto en marcha varias iniciativas enfocadas al turismo enológico en la ciudad con un importante éxito. Para que el turista se sumerja en el mundo del vino, a lo largo del recorrido por la bodega se le da la posibilidad de conocer los aperos utilizados para el trabajo de labranza en el campo, y se guarda un especial protagonismo para una bota de manzanilla con el velo de flor. “Es bastante complicado hacer entender a los visitantes que es la flor”, cuenta Nuria de los reyes, la responsable de realizar las visitas al Centro de Interpretación. “Por eso decidimos dedicar un espacio en el que los visitantes pudieran ver en directo cómo es el velo de flor que permite la fermentación de la manzanilla”.
Tras abandonar la zona de crianza de las botas en la bodega, los visitantes pasan a una segunda sala en la que los esfuerzos se dirigen a poner de manifiesto la vinculación entre el vino y la gastronomía. Pero antes, los visitantes podrán oler cada uno de los aromas que encierran los vinos de la Denominación de Origen Manzanilla de Sanlúcar, Jerez, Xèrez, Sherry y Vinagre, en unos pequeños tarros de esencias. Así se estimula el olfato para que la posterior degustación del vino se aprecie con más intensidad.
En una segunda fase del proyecto, se pretende que los turistas puedan realizar el recorrido por el Centro de Interpretación valiéndose de dispositivos digitales y que también pueda aprovecharse la proximidad de la viña de Delgado Zuleta para que, en época de vendimia, sean los visitantes los que se encarguen de recoger la uva, prensarla e implicarse así en la primera parte del proceso. El objetivo final: que la gente salga del centro conociendo lo que son la Manzanilla y los Vinos de Jerez y la historia y tradición que avalan a los vinos de esta DO y que han marcado el desarrollo de un pueblo como Sanlúcar.
En este sentido, el director general de las bodegas, Jorge Pascual, señalaba la importancia de que los escolares participen en esta iniciativa, “para conocer los orígenes de sus padres”. “Es necesario que sepamos transmitir la tradición de nuestros vinos, que las profesiones como la de tonelero no se pierdan”, incidía Eva Buzón, por lo que para el próximo curso escolar se incluirá la oferta del centro en los colegios.
OFERTA
El reto de ambas empresas es que en el plazo de un año sean alrededor de 2.500 los visitantes que pasen por el Centro de Interpretación del Vino. Ya se están dando los primeros pasos contactando con touroperadores para que esta nueva oferta enfocada al turismo enológico se comercialice y pase a engrosar las posibilidades que el sector bodeguero tiene en Sanlúcar. Al respecto, Jorge Pascual señala que es un atractivo más en la ciudad, que se une al Museo de la Manzanilla o a las bodegas que por estar en el Barrio Bajo despiertan un interés especial. “Se trata de ofrecer algo que no ofrecen los demás y, además, hacerlo de una manera divertida”. En el mismo sentido se muestra convencido de la repercusión de la iniciativa en la economía local “porque las personas que vengan van a acudir también a los restaurantes y se van a quedar a pernoctar en Sanlúcar”.
La inversión inicial es de 3.000 euros pero en los próximos meses, en función del éxito del proyecto, se pretende elevar hasta los 60.000 euros, con mejoras encaminadas al acondicionamiento de la bodega para acoger a los visitantes.
Por parte del Ayuntamiento de Sanlúcar se ha valorado de forma muy positiva la puesta en marcha de este proyecto. La alcaldesa mostró durante la inauguración su agradecimiento y satisfacción por el hecho de que dos empresas sanluqueñas se hayan unido para poner en marcha un proyecto pionero en el Marco de Jerez que permite a Sanlúcar abanderar una iniciativa como ésta. “Pocas veces teníamos continente y contenido de una forma tan especial, y al mismo tiempo tan tradicional”, destacó Irene García en alusión al nuevo uso dado a esta bodega. Además, la primera autoridad local mostró su optimismo “porque este proyecto tiene que crecer y porque ponemos una piedra importante para que nuestra ciudad lance mensajes en positivo”.
