La Audiencia Provincial de Cádiz acoge este martes el juicio contra un portero de una discoteca de El Puerto que en 2001 agredió a dos clientes de la misma, uno de los cuales también se sienta en el banquillo de los acusados por amenazar y tratar de atacar al primero con un hacha.
Según el escrito de calificación fiscal, los hechos tuvieron lugar a altas horas de la madrugada, cuando el encargado del local ordenó al primer acusado, el que trabajaba como portero, que sacara del mismo al otro acusado, a quien, una vez en el exterior, supuestamente golpeó en la nariz y en el rostro. Acto seguido, el portero habría entrado en el local y golpeó a un acompañante de la persona a la que acababa de agredir fuera, causándole una contusión en el codo derecho que tardó 30 días en curar, de los cuales diez fueron impeditivos de sus ocupaciones habituales.
Tras dichas agresiones, una ambulancia acudió al lugar a fin de trasladar al primer agredido y también acusado a un centro hospitalario. No obstante, antes de recibir asistencia, éste se habría marchado a su casa para coger un hacha con la que supuestamente volvió al establecimiento. Al verlo llegar con el hacha, el portero del local procedió a cerrar la puerta de acceso principal, con lo que el otro acusado comenzó a proferir gritos y amenazas tales como "negro de mierda, te voy a matar", para después empezar a dar golpes con el hacha a la puerta principal, la cual cedió y se abrió. Luego golpeó la cristalera de entrada hasta fracturarla completamente, causando daños pericialmente valorados en 1.956 euros.
Esto provocó una "situación de temor" en el otro acusado, quien, para deterle, le tiró una piedra que cogió del suelo en el pecho sin lograr que el otro dejara de amenazarle, arrojándole otra piedra a la cabeza que lo derribó al suelo. Tras ello, se acercó al portador del hacha y comenzó a presionarle el brazo izquierdo con el pie. Así, según el escrito del fiscal, le causó lesiones consistentes en un trauma craneal grave con fractura frontal y fractura de cúbito, que tardaron 110 días en curar, 13 de los cuales debió de permanecer hospitalizado.
La Fiscalía considera que el acusado que trabajaba como portero del local es autor de una falta de lesiones, por lo que reclama una multa de dos meses a razón de ocho euros diarios, y de un delito de lesiones, por el que pide la pena de cuatro años de prisión. Así mismo, en materia de responsabilidad civil, debe indemnizar con 6.565 euros al otro acusado y con 1.045 euros a la otra persona que agredió.
El segundo acusado sería responsable de un delito de amenazas, por el que reclama un año y medio de prisión, y también de un delito de daños por el que pide 18 meses de multa con una cuota diaria de ocho euros. En cuanto a responsabilidad civil, debe indemnizar al dueño del establecimiento en la cantidad de 1.956 euros por los daños causados en la cristalera.
