El secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Ulloa, impuso ayer en Sevilla la Medalla de Oro al Mérito Policial a título póstumo a Carlos Calderón Arias, el agente de la Policía Nacional destinado en la comisaría de Alcalá de Guadaíra que falleció este miércoles cuando auxiliaba a dos bañistas, uno de nacionalidad irlandesa y el otro francesa, en la playa de El Palmar, en Conil de la Frontera (Cádiz).
El acto se celebró en la sede de la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Occidental, y al mismo asistieron, además de los padres, la mujer y amigos y compañeros del fallecido, diversas autoridades como Ulloa; el director general de la Policía, Ignacio Cosidó; la subdelegada del Gobierno en Sevilla, Felisa Panadero, o la delegada del Gobierno de la Junta en Sevilla, Carmen Tovar.
También asistieron al acto el alcalde de Alcalá de Guadaíra, Antonio Gutiérrez Limones; el delegado de Seguridad del Ayuntamiento de Sevilla, Demetrio Cabello, o el coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla, Juan Roldán, entre otros.
Antes de imponer la medalla al policía fallecido, el secretario de Estado de Seguridad dio el pésame a sus padres y su mujer, que estaban situados junto al ataúd con el cuerpo del finado, cubierto por una bandera de España, mientras que justo al lado había también una fotografía del agente y numerosas coronas de flores de distintos destinatarios.
Tras hacer entrega de la medalla, Ulloa dirigió a los presentes unas breves palabras al objeto de “honrar la memoria” del policía fallecido, destacando “la ejemplaridad en el cumplimiento de sus funciones, mucho más allá de lo que le exige” su puesto, alcanzado así “el carácter de lo heroico y entrando dentro de la memoria” de la Policía.
Por todo ello, quiso agradecer a sus padres y a su mujer el “sacrificio” de Carlos, que dio “un buen ejemplo de los motivos por los que vale la pena dar la vida”, palabras ante las que la madre y los familiares del fallecido no han podido evitar llorar desconsoladamente, marcando un acto “triste” donde el silencio sólo ha sido roto por el himno de España con el que se ha dado por finalizado el mismo.
De su lado, Cosidó quiso “rendir homenaje a este policía, a este compañero, a este héroe que nos ha abandonado”, y ha traladó a sus familiares las condolencias del ministro de Interior.