Míchel quiere más de Reyes. Pese a su calidad, lo mostrado el año pasado, con lo que gana, con lo que se le necesita, no es ni mucho menos suficiente. Por eso, el entrenador está insistiendo en el trabajo psicológico, para que eso redunde en lo físico y al final en lo futbolístico. El jugador acudía a sala de prensa para ratificar lo expuesto.
“El cuerpo técnico está hablando mucho conmigo estos días. Quiere lo máximo de mí y yo se lo he garantizado. Es muy importante trabajar en la pretemporada con el equipo y este año lo estoy haciendo”, aseguró.
Pero, ¿está Reyes preparado para tirar de un carro como éste? Dice que sí. “A lo mejor en el Arsenal, por mi edad, y en el Real Madrid, porque eran otros los jugadores como esos galones, pues no tuve que asumir ese rol de jugador importante, pero en el Atlético ya lo hice, era uno de los cuatro que siempre estábamos en esa función. Incluso me gusta ese papel. No le tengo miedo ni mucho menos”.
La intención está. Pero cabe la duda de que el físico ya no sea el mismo, que Reyes ya no se pueda mover como en otros tiempos. “No estoy a estas alturas al cien por cien, desde luego, ni yo ni nadie, pero trabajo con el primer grupo (el de los más fuertes) así que no estaré tan mal desde ese punto de vista. El año pasado no hice la pretemporada en condiciones y se notó, pero este año todo va bien”, aseguró.
En lo futbolístico, Míchel le pide a Reyes sobre todo una cosa, “que desborde”, porque lo realmente llamativo y peligroso de este futbolista es esa cualidad que en sus últimas campañas ha ido desapareciendo. Y lo que más le llama la atención al jugador, en ese plano de la convivencia, es que “el cuerpo técnico está trabajando fuerte, y así hay que reconocerlo, en ese plano. Nos pide a todos que no se llegue tarde a nada y sobre todo que no se le falte el respeto a ningún compañero. Otra cosas son las bromas, como la que le hicimos a Rabello. Los nuevos también se están adaptando al grupo y son ya de la familia. No hay problema, todo lo contrario”.