A pesar de la crisis, la apuesta por los productos de calidad permitirá a la industria del mantecado aumentar su producción en torno a un 30%, superando los 500.000 kilos de la campaña.
Antequera destaca por muchos aspectos, la historia, la cultura, los monumentos, las tradiciones, pero también por la gastronomía, donde los mantecados y dulces navideños son el producto estrella.
Desde hace varios meses el olor inunda las calles de la ciudad, dado que desde finales de verano, la mayoría de las fábricas de mantecados comienzan a trabajar en la elaboración de los productos.
“Comenzamos a producir a finales de agosto o principio de septiembre, hasta finales de diciembre. Más allá de Navidad no interesa porque después no tienen la suficiente aceptación”, explicó Violeta Rivas, gerente de Delicias de Antequera.
En cuanto a la producción de este año, la propia Rivas explica que, en el caso de su fábrica, esperan producir más de los 300.000 kilos del pasado año, ya que, en apenas un mes, han alcanzado un 30% más que en 2011, por lo que rondarán los 400.000 kilos. Un aumento de la producción, y por lo tanto de la facturación, que se debe principalmente a la calidad.
“En la calidad está la clave, en la exclusividad de nuestros productos, muy artesanos y con buen precio, que hace que la gente, a pesar de la crisis, haya apostado por ellos”, dice Rivas.
En el caso de La Antequerana, la fábrica más antigua de la ciudad, también trabajan a buen ritmo para alcanzar los 100.000 kilos de mantecados que producen anualmente. “El comienzo de campaña está siendo más tranquilo que años anteriores, pero cerraremos el año alcanzado sin problemas los datos anuales”, manifiesta Guillermo Ramos, gerente de La Antequerana.
La industria del mantecado emplea a más de un centenar de trabajadores, entre fijos y eventuales, en las diferentes fábricas de Antequera, principalmente mujeres que repiten año tras año en las sedes industriales. “La incorporación de personal es progresiva, llegaremos a las 20 o 25 personas a lo largo de octubre y noviembre, los meses más fuertes de la campaña”, comenta Ramos.
El problema de estos empleos es que son temporales, ya que el número de puestos de trabajo se ve reducido en algo más de la mitad tras las fiestas, ya que la demanda se reduce una vez pasada Nochebuena en un 80%.
Polvorones, roscos, alfajores o novedades como el polvorón al baño de chocolate blanco, ya se pueden adquirir en cualquiera d elas empresas del sector.
