El alcalde, José Ignacio Landaluce, manifestó que “Algeciras no se merece este desprecio por parte de la Junta, que constituye una puñalada económica para los intereses de la ciudad”. De este modo, anunció la interposición de medidas para tratar de evitar las consecuencias.
En primer lugar, convocó a una reunión urgente a los portavoces de PP, PSOE, IU y PA, e introducir este asunto en el orden del día de la reunión que iban a mantener con el delegado territorial, Federico Fernández.
El primer edil y los portavoces expusieron la repercusión que esta decisión podría tener para el bolsillo de los algecireños. El primer edil insistió en que no sería lógico verter al mar toda el agua sobrante del caudal ecológico, y anunció, con el apoyo de los portavoces, la presentación de alegaciones.
Para el Ayuntamiento, “no es de recibo el trato institucional” recibido, ya que “una decisión de tanta gravedad”, se ha tomado “sin comunicación previa al Ayuntamiento, sin el más mínimo estudio sobre las repercusiones para la ciudad, sin informes técnicos ni jurídicos sobre el desarrollo de dicha concesión” y faltando a las “normas de respeto político”.