Los trabajadores de Moltuandújar --integrada en un 70 por ciento por Sovena y en un 30 por ciento por el Grupo Deoleo-- han reclamado un convenio colectivo que homogeneice los derechos de todos ellos tras la nueva participación de la compañía lusa en la 'joint venture', que ha conllevado la transferencia a ésta de los empleados adscritos a la molturación y refino de aceite de semillas que trabajaban para Deoleo.
Según han manifestado a Europa Press fuentes de los trabajadores, este mes esperan establecer con la empresa un calendario de negociación. Así, el comité de empresa tiene la "pretensión" de establecer un convenio único que sea de ámbito de aplicación de todos los trabajadores del centro de trabajo de Moltuandújar en la localidad jiennense.
Tal y como han continuado las fuentes, hay trabajadores --los que proceden de Deoleo-- que "han sufrido recortes, entre otras cosas porque sobre ellos recayó un expediente de regulación de empleo (ERE), conviviendo con otros que no los han sufrido". No obstante, han hecho hincapié en que sus "exigencias se centran en mantener derechos más que en reivindicar así como en igualar los derechos de la totalidad de empleados".
Así las cosas, los trabajadores esperan que las negociaciones del futuro convenio comiencen antes de julio, toda vez que "el periodo vacacional dificulta llegar a acuerdos". Además, temen "que se termine la ultractividad el próximo 31 de diciembre y que ello dé problemas al quedarse sin un convenio al que acogerse". "No queremos perder los derechos conseguidos de un plumazo y caer en conflictividad laboral".
Cabe recordar que Moltuandújar es la 'joint venture' creada en enero de 2012 entre ambas empresas, Grupo Deoleo y la compañía lusa Sovena, y en la que ambas participaban cuando se creó al 50 por ciento. Sin embargo, el pasado mes de mayo Sovena se hizo con el 70 por ciento de la propiedad de Moltuandújar.
