El embajador de Francia en Irak, Denys Gauer, ha ofrecido este lunes al Gobierno de Irak armamento, entrenamiento y cooperación a nivel de Inteligencia para hacer frente al incremento de los atentados terroristas en el país, según ha informado la cadena de televisión británica BBC.
El ofrecimiento ha llegado en una jornada plagada de atentados, como el que ha provocado la muerte a al menos 18 personas tras la explosión de dos bombas en una cafetería del barrio de Sadriya, de mayoría chií y situado en el este de Bagdad.
"Cuando estalló la primera bomba, la gente corrió a ver qué pasaba. Minutos después, explotó la segunda", ha relatado un tendero que se ha identificado como Abu Zuhair. "Vi a muchos heridos y muertos. Todo el mundo huía de la zona", ha contado.
Este doble atentado, que no se ha atribuido ningún grupo, es el tercer ataque ocurrido durante la jornada en la capital de Irak y sus alrededores.
En un puesto de control policial en la parte noreste, tres agentes han muerto y siete han resultado heridos por la inmolación de un suicida, mientras que en el barrio suní de Doura, en el sur de Bagdad, dos milicianos 'sahwa' afines al Gobierno han perdido la vida y cuatro más han sufrido heridas por la explosión de un artefacto improvisado.
Cientos de iraquíes han muerto cada mes en ataques similares a los de hoy desde principios de año. La creciente violencia en el país ha hecho aumentar el temor a que se vuelva a la ola de violencia sectaria de 2006-2007, cuando murieron decenas de miles de personas.
Casi un millar de iraquíes murieron en octubre, según las cifras de la ONU, que ha pedido a los líderes políticos que cooperen para poner fin a la violencia que ha ido en aumento desde que las tropas de combate de Estados Unidos abandonaron el país en diciembre de 2011.
El primer ministro iraquí, el chií Nuri al Maliki, advirtió a finales de octubre de que su país se enfrentaba "a una guerra genocida" e hizo un llamamiento en favor de la celebración de una conferencia internacional para hacer frente al terrorismo en Irak.
Una de las principales preocupaciones derivadas del conflicto en Siria para Bagdad es la presencia en el país del Frente al Nusra, una organización vinculada con Al Qaeda que ya ha sido incluida por Estados Unidos en su lista de organizaciones terroristas, y del Estado Islámico de Irak y el Levante, surgido tras la unificación del Estado Islámico de Irak --la rama de Al Qaeda en el país-- y varias milicias salafistas sirias.
En febrero, el Estado Islámico de Irak llamó a levantarse en armas contra el Gobierno de Al Maliki a la población suní de Anbar --la provincia más grande del país y con fronteras con Jordania, Siria y Arabia Saudí-- y, por extensión, del resto del país.