La Fiscalía de Málaga ha mantenido la acusación contra un hombre por el incendio forestal ocurrido en su parcela en mayo de 2007, al considerar que el fuego se produjo por un fallo eléctrico en un motor de bombeo que no había recibido el mantenimiento adecuado, además de que se había incumplido las exigencias de seguridad por parte del procesado, para el que solicita nueve meses de prisión y multa de 3.240 euros.
El juicio ha quedado este martes visto para sentencia en el Juzgado de lo Penal número 11 de Málaga. El incendio se produjo en una parcela ubicada en el paraje Guadalmansa, en el término municipal de la localidad malagueña de Estepona, donde había "abundante" arbolado y matorral y que era propiedad del acusado, que tenía allí una casa y que había instalado un motor de bombeo de agua para una laguna artificial.
"La falta del adecuado mantenimiento de la instalación y el incumplimiento de las mínimas exigencias de seguridad por parte del acusado", dice el fiscal, provocó un fallo en las conexiones del motor y la combustión del cableado y de la arqueta, propagándose el fuego a la hojarasca existente en los alrededores y de ésta al monte. Además, sostiene que no se había realizado el cortafuegos en la zona como exige la normativa.
El hombre, al que se le acusa de un delito de incendio forestal causado por imprudencia, ha declarado que el fuego no empezó en la zona donde se ubica el motor, sino al otro lado del lago artificial, a unos 40 o 50 metros; y que la caseta con el sistema de bombeo de agua estaba "en perfecto estado". Aunque ha reconocido que no se habían realizado tareas de mantenimiento, ha asegurado que fue un profesional el que hizo toda la instalación.
A causa del incendio ardieron ocho hectáreas de superficie forestal arbolada, 11,30 de matorral, 0,50 de pastizal, 11,80 de superficie forestal desarbolada y 0,70 de terreno agrícola, según el escrito inicial del fiscal, al que tuvo acceso Europa Press, que añade que esto generó unos gastos de extinción de 37.120 euros, cantidad que la acusación pública pide como indemnización para la Junta de Andalucía.
Asimismo, en el juicio han comparecido dos peritos, uno propuesto por la defensa; los cuales han mantenido posturas encontradas sobre el origen del fuego. Así, mientras el perito de medio ambiente ha sostenido que el incendio se inició a causa de un cortocircuito en el motor, el otro experto ha asegurado que dicho cortocircuito fue consecuencia del fuego, que había comenzado previamente. Además, otro especialista ha asegurado que la zona está prácticamente regenerada.