El presidente de la Asociación de Industrias Químicas, Básicas y Energéticas de Huelva (Aiqbe) y director de Cepsa Refinería La Rábida, Rafael Martínez-Cañavate, ha defendido este jueves la necesidad de que se elabore un marco "legal" estable en materia energética al ser este elemento "vital" para el sector.
En declaraciones a los periodistas antes de ofrecer una ponencia en la inauguración de la jornada provincial de presentación de la Estrategia Energética de Andalucía 2014-2020, Martínez-Cañavate ha recordado que las empresas hacen las inversiones con un horizonte "a largo plazo", y de ahí, la importancia, a su juicio, de contar con "un marco estable" para "conocer los costes energéticos que van a tener" de cara al futuro.
En este sentido, ha dejado claro que la cuestión energética es "clave" para todas las empresas asociadas a la Aiqbe, ya que "para ser competitivos en el mercado tenemos que tener un marco estable y que se mantenga en el tiempo", ha incidido Martínez-Cañavate. "Los proyectos que se generan en la industria dependen mucho de en qué campo de fútbol se va a jugar", ha dicho, utilizando un símil futbolístico con el fin de incidir en la idea de la importancia de la estabilidad normativa para la actividad industrial.
Tras subrayar que el tema de la energía es "complejo", el director de Cepsa Refinería La Rábida ha insistido en que otro punto fundamental es conocer los costes de producción de la energía. A su juicio, "es importante definir la estrategia porque se pueden desempolvar proyectos o anular otros" relativos a la optimización de los recursos en las instalaciones.
Martínez-Cañavate ha calificado de proyectos "siempre vivos" los relacionados con el ahorro energético, agregando que las industrias de Aiqbe "cumplen ya ese objetivo muy por encima del 20 por ciento" marcado ya que "en eso la industria es puntera porque se le va la vida en ello" al ser la energía "el principal costo de producción".
Respecto al borrador de la reforma energética del Gobierno, del cual Ence ha alertado que "pone en riesgo" el futuro de su planta de Huelva, Martínez-Cañavate ha recordado que ese borrador es "aún un cúmulo de ideas, y nosotros trabajamos con números, no ideas". "Nos interesa saber dónde nos vamos a mover con datos", ha apostillado, antes de subrayar que "la energía es vital para todas las empresas de la Aiqbe".
En su opinión, "la situación puntual que se pueda dar en un momento, o en un determinado reglamento, afectará a unos más que a otros, pero es un tema que afecta a todos", ha zanjado.
EL COSTE DE LA ENERGÍA, "MUY IMPORTANTE"
De otro lado, en su ponencia 'El sector industrial ante la realidad energética actual', ha expuesto que el control de costes de energía está centrado en dos factores, de un lado, el precio de la unidad de energía y de otro, el consumo unitario de energía, es decir, "cantidad de energía consumida por unidad de producto fabricado o transformado".
De este modo, ha resaltado que "en las estructuras industriales de costes, la energía representa el capítulo más importante y casi decisivo para hacer competitiva una empresa o expulsarla del mercado, aún más, si éste es el internacional". En concreto, el coste energético puede oscilar entre el 20 y el 50 por ciento de los costes totales de producción, según ha precisado el presidente de la Aiqbe, que ha puntualizado que al hablar de energía se refiere tanto a la eléctrica como a la térmica.
Respecto al precio de la electricidad, que viene influido "de forma importante" por el precio del gas, ha apuntado que recibe además unas cargas, donde han primado "las políticas ambientales sobre las puramente energéticas o económicas sin que los impactos de semejantes medidas estuviesen evaluados con proyección futura".
"En España hemos pasado de tener un 25 por ciento de PIB industrial en 1980 a un 13 por ciento en 2013; las cifras andaluzas son aún inferiores. España, y en general Europa, también parece que está renunciando a explotar las fuentes de Shale-Gas y Shale-Oil", ha añadido.
A su juicio, "esta explotación le ha permitido a Estados Unidos estar disfrutando de un precio más barato que en Europa. El gas es un 60 por ciento más barato, y el petróleo un 15 por ciento, cuando hace sólo cinco años eran similares".
Así las cosas, ha planteado que haya "un precio de la energía que permita competir en los mercados internacionales y un marco estable que dé previsibilidad y seguridad en el medio y largo plazo".
Finalmente, ha destacado "el esfuerzo por mejorar la eficiencia energética" de las empresas de la Aiqbe, ya que las mismas "han superado ampliamente el objetivo de mejora de eficiencia del 20 por ciento llegando a alcanzar valores de más del 40 por ciento en las industrias de mayor consumo energético".