La junta de gobierno del Ayuntamiento de Sevilla, reunida este viernes en sesión ordinaria, ha aprobado ceder al Museo Metropolitano de Arte de Nueva York tres piezas del famoso tesoro del Carambolo, descubierto en 1958 en Camas y formado por 21 piezas de oro de 24 kilates, para una muestra temporal que acogerá este espacio cultural de proyección internacional entre el 15 de septiembre del año en curso y el 4 de enero de 2015, según ha informado el portavoz del Gobierno municipal hispalense, el concejal Francisco Pérez.
Las tres piezas del fabuloso tesoro que serán trasladadas a Nueva York para esta muestra temporal son, en concreto, uno de los dos brazaletes cilíndricos valorado en 800.000 euros a efectos de seguro, uno de los dos frontiles con roseta que cuenta con un valor de un millón de euros a efectos de seguro y el collar del ajuar, cuyo valor a efectos de seguro asciende nada menos que a tres millones de euros.
"Es una promoción espectacular para la ciudad", ha enfatizado el portavoz del Gobierno local señalando que estas piezas de estarán expuestas en un centro cultural "de primera magnitud" internacional, como es el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York. Los gastos de seguridad, garantías y traslado, como ha explicado Francisco Pérez, correrán a cargo del museo neoyorkino.
El tesoro del Carambolo, incomparable icono del patrimonio histórico andaluz, fue descubierto en 1958 en el cerro homónimo de Camas, en el marco del hallazgo de los vestigios arquitectónicos de un antiguo santuario que los expertos atribuyen a una población de influencia fenicia. Sus 21 piezas de oro habrían sido labradas al estilo oriental entre los siglos VII y VIII antes de Cristo y pertenecen al Ayuntamiento de Sevilla, si bien el conjunto del tesoro está sujeto a la colección del Museo Provincial de Arqueología, perteneciente al Estado pero gestionado por la Junta de Andalucía.
El Museo Provincial de Arqueología, en ese sentido, muestra en su exposición permanente sólo una réplica del tesoro, pues el ajuar original regresó a su caja de seguridad después de ser expuesto durante un breve periodo de tiempo en 2012 a cuenta de los gastos de seguridad implícitos en su incorporación a la muestra permanente del museo.