Manuel Ruiz de Lopera, exmáximo accionista del Betis, ha recurrido su procesamiento porque no se ha demostrado el perjuicio causado ni sus “gastos innecesarios” y la jueza Mercedes Alaya ha hecho un “relato fabulado e inverosímil" sobre su supuesto "plan preconcebido" para hacerse con el club.
El abogado del exdirigente béticos, en un recurso al que ha tenido acceso Efe, rechaza el supuesto perjuicio de 24,9 millones de euros que, según los peritos judiciales, causó su gestión pues son "básicamente el resultado de computar la totalidad de los ingresos canalizados a través de las sociedades auxiliares y solo una fracción de los gastos”.
Además rechaza los gastos calificados como “innecesarios” por los peritos, entre los que se encuentran los sueldos de los peones de mantenimiento del estadio, los acomodadores, el encargado del marcador o las limpiadoras, por lo que exige una “concreción” para poder llevar a cabo una “defensa cabal” ya que la Inspección de Hacienda efectuada sí que consideró esos gastos como propios de la actividad deportiva del equipo de las trece barras.
El recurso expresa que “la misma pregunta cabe hacerse respecto de las más de 40.000 retribuciones individuales satisfechas por este concepto durante los 15 ejercicios a que se refiere esta causa”.
La jueza Alaya, ha dictado auto de procesamiento a Manuel Ruiz de Lopera por entender que ejecutó un “plan preconcebido”, que él diseñó "en perjuicio de la sociedad y en su propio beneficio”.