La Policía Local de Málaga, en concreto agentes del Grupo de Investigación y Protección (GIP), han imputado a un joven de 21 años como presunto autor de un delito contra la propiedad industrial e intelectual, al haberse localizado en una nave comercial 28.465 prendas y artículos falsificados, entre ellos 2.730 equipaciones de la selección española de fútbol. También ha sido denunciado administrativamente por la venta de artefactos pirotécnicos sin estar autorizado para ello.
La investigación culminó a finales del pasado mes de mayo, cuando policías locales del GIP se personaron en el establecimiento comercial, ubicado en la calle Andre Gide del Polígono Guadalhorce y comprobaron que en el interior tenía expuestas a la venta algunas prendas y artículos de distintas marcas comerciales, presumiblemente falsificadas.
Los agentes inspeccionaron a fondo el resto del comercio en presencia del encargado del mismo, localizando, sobre todo en la zona de almacenaje, un total de 28.465 prendas y artículos presumiblemente falsificados, tratándose concretamente de 2.730 equipaciones de la selección española de fútbol, compuestas por camiseta y pantalón; 596 gorras; 1.608 monederos, carteras y billeteras; y 20.801 'blisters', chapas, cartas y pegatinas infantiles; siendo todo ello intervenido, quedando debidamente inmovilizado y precintado en el lugar.
Los policías locales contactaron con los representes legales de las marcas registradas que habían sido presuntamente falsificadas, tales como la propia Real Federación Española de Fútbol, el Real Madrid, el Fútbol Club Barcelona o Disney, entre otras; que fueron informados de los hechos, así como de los derechos que les asistían como perjudicados por delito.
ANTECEDENTES POR HECHOS SIMILARES
Por otro lado, encontraron gran cantidad de material pirotécnico, concretamente un total de 187.750 artefactos, los cuales fueron intervenidos y trasladados para ser remitidos al depósito judicial de piezas y efectos, levantándose la correspondiente acta de intervención y denuncia al individuo por carecer de autorización de la Subdelegación de Gobierno para la tenencia y venta de dichos productos.
Tras lo acontecido, los policías locales realizaron las gestiones oportunas para localizar a la propiedad de la empresa, que resultó ser la madre del joven. A éste se le imputó al encontrarse como responsable de la misma en el momento en el que los agentes realizaron el operativo.
Además, comprobaron que a este individuo le constan antecedentes previos por hechos delictivos similares, tratándose concretamente de dos faltas contra la propiedad industrial o intelectual por las que fue imputado durante el pasado año.