La Audiencia Nacional ha concedido la libertad condicional al etarra Asier Arronategui Duralde. Según el auto judicial al que ha tenido acceso Europa Press, la decisión parte de una propuesta a favor elevada por Instituciones Penitenciarias. Arronategui, hoy fuera de la disciplina etarra, fue detenido en México en 2003 y se irá definitivamente a casa pese a que no termina de cumplir condena hasta febrero de 2015.
Arronategui fue condenado por integrar una estructura estable de ETA en México junto a otros terroristas. Actuaban siguiendo las directrices de la dirección etarra: complementaban los objetivos logísticos, financieros y estructurales que ETA, en ese momento, no conseguía desarrollar de forma plena en Francia.
En concreto, Arronategui era quien facilitaba la provisión de fondos a la dirección de la banda en Francia, que posteriormente enviaba el dinero a los responsables del colectivo en México. Estas transferencias de dinero sirvieron para cubrir necesidades de infraestructura propias y para financiar a algunos miembros de ETA en México.
Para acceder a la libertad condicional es necesario que previamente la Administración Penitenciaria conceda el tercer grado penitenciario, algo que en el caso de Arronategui se produjo el pasado 9 de mayo. Posteriormente, la Junta de Tratamiento de Basauri (Vizcaya) elevó su propuesta de libertad condicional cuya competencia recae exclusivamente en los jueces.
MEDIDA MUY POCO HABITUAL
A lo largo de la presente legislatura son muy pocas las veces que el Ministerio del Interior ha accedido a conceder terceros grados (ir a la cárcel sólo a dormir) a presos etarras, ni si quiera para los internos acogidos a la denominada 'Vía Nanclares' tras romper con ETA.
Entre enero y agosto de 2012, el Departamento que dirige Jorge Fernández Díaz concedió cuatro terceros grados (a Iurgi Oteiza, Fernando Luis De Astarloa, Juan Manuel Fernández Pérez y Andoni Díaz Urrutia). El siguiente fue el tercer grado del etarra Bolinaga justificado en razones humanitarias y que derivó también en una libertad condicional tras el verano de 2012.
Pero después de la excarcelación del secuestrador de Ortega Lara y asesino de tres guardias civiles, uno de los episodios más polémicos a los que se ha enfrentado el Gobierno de Mariano Rajoy, las concesiones de terceros grados o salidas extraordinarias de prisión se redujeron drásticamente.
En 2013 Interior frenó el tercer grado para los disidentes etarras Kepa Pikabea e Iñaki Rekarte, pese a que contaban con el visto bueno de la cárcel de Zaballa (Álava). Este mismo mes, la Audiencia Nacional concedió otro permiso de salida de seis días de prisión al disidente Urrusolo Sistiaga pese a la oposición de Prisiones en lo que es una tónica habitual.
HA ROTO CON LA BANDA
Según el auto dictado por el Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria, Arronategui "ha realizado una declaración expresa de repudio de sus actividades delictivas dentro de la banda terrorista (...) y petición, también expresa, de perdón a las víctimas de su delito. También ha manifestado su disposición a colaborar activamente con las autoridades en aquello que le sea requerido".
El Juzgado también destaca su "buena conducta en prisión", el "apoyo familiar" o "su separación del resto de internos terroristas en el interior del establecimiento penitenciario. Otro factor a tener en cuenta es el visto bueno de la Fiscalía a esta libertad condicional.
Arronategui fue detenido en México el 19 de julio de 2003 y permaneció en una cárcel de México D.F. hasta su extradición a España el 18 de mayo de 2006. Él y sus compañeros llegaron incluso a protagonizar una huelga de hambre de 22 días en julio de 2004, recibiendo el apoyo de algunos grupos radicales mexicanos, tradicionalmente defensores de la organización terrorista.
El 19 de junio de 2008 se acordó su libertad provisional y fue juzgado el jueves 30 de julio de 2009. La Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional le condenó a seis años de cárcel a la que accedió para finalizar su condena una vez el Tribunal Supremo la hizo firme. Fue condenado después de que sus defensas llegasen a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía.