Toda una vida dedicada al trabajo tienen su recompensa, y esta es mayor si tu trabajo es tu pasión. Este es el caso de María Dolores Oliva Muñoz, que tras dedicarse a la costura desde que era una niña, ahora ha visto cumplido su sueño de tener su propia marca de moda, Olivalsur.
María Dolores es “barbateña de toda la vida”, aunque con 22 años se casó y se fue a vivir fuera de nuestras fronteras “por el trabajo de mi marido”, explica. Desde entonces han pasado cuatro décadas y María Dolores ha residido en varios lugares de España, hasta que hace 24 años llegó a Estepona (Málaga), donde vive desde entonces con su familia.
A lo largo de su vida y de los lugares donde ha residido, María Dolores siempre se ha dedicado a lo mismo: a ser modista. Ya fuera haciendo prendas que imaginaba en su mente o modelos concretos que le traían las clientas, esta barbateña ha prestado su don para la costura a quien lo haya necesitado.
“Me gustaba la costura desde niña y fui aprendiendo, empecé en el taller de Ángel”; así que con 13 años ya estaba trabajando en un taller de bordado y se fue haciendo conocida entre los barbateños por sus confecciones. “Las muchachas me buscaban para hacer los vestidos de novia”, recuerda de entonces.
El destino la llevó hasta Estepona, donde continúa trabajando y tiene muchas clientas, que acuden a ella para realizar sus vestidos “aunque también les aconsejo porque son muchos años y ya conozco los gustos de cada una”. A lo largo de su vida se ha planteado montar una empresa “pero no me decidía”. Sin embargo, sus hijas le han dado el empujón que necesitaba y han creado para ella la firma de moda Olivalsur, cuyos diseños se pueden ver en su página de Facebook.
Nuevo proyecto
A pesar de que ninguna de ellas es modista de profesión, “mis hijas han aprendido la costura desde pequeñas, la han vivido en casa”, por lo que a María Dolores no le extraña que “estén más ilusionadas que yo con este proyecto”. Ya están preparando una nueva colección y se están intentando hacer un hueco en el mundo de la moda, por lo que María Dolores es muy optimista y afirma que “la marca tira para adelante”. Por el momento, tanto ella como sus hijas se muestran muy contentas y con mucho trabajo por hacer, ya que preparan un desfile en Madrid para el próximo mes de febrero.