Diego Villegas Gómez, uno de los jóvenes músicos de viento con más proyección del panorama musical actual, prepara disco. Mientras, no para de actuar en España y el extranjero. Concretamente la semana pasada viajó a México para actuar en el Teatro Bellas Artes de la capital azteca, con la compañía de María Juncal, representando la obra El encierro de Ana Frank.
A su vuelta viajará de nuevo, esta vez para visitar, Camagüey, en Cuba, donde aporta la música a un espectáculo de la bailaora Carolina Pozuelo, que se titula De la Habana vengo, a la Habana voy y que describe desde que la música llegó a Cuba, procedente de África, y su desarrollo, del que surgió entre otros “palos” el Punto Cubano, que más adelante llegará a ser la Guajira Flamenca.
Villegas es asiduo acompañante de varios músicos de prestigio, como Javier Ruibal, con el que colabora desde que este sacó a la luz su último disco, Quédate conmigo o Remedios Amaya, con la que ha compartido escenario en varias ocasiones. Su última aparición en Sevilla fue el pasado 17 de febrero en el Teatro Lope de Vega, acompañando a Asunción Demartos en el estreno absoluto de su última obra Bailaora.
El trabajo discográfico que prepara Diego Villegas llevará el nombre de Bajo de Guía, será auto producido y flamenco, así que no faltarán en él las Alegrías, Soleás, Tanguillos, Bulerías y otros palos del flamenco.
Bajo de Guía es, sin duda, el barrio más conocido de Sanlúcar de Barrameda. Barrio marinero de enorme historia, tradición y paso de las Hermandades Rocieras que van camino del poblado. La salida diaria de sus gentes, en faenas pescadoras, cruzando el Guadalquivir bajo el amparo de su Virgen del Carmen y, cómo no, el paso diario de propios y extraños que buscan en uno de sus múltiples restaurantes, que miran a Doñana, esos frutos de la mar de calidad sin igual. Como toda música que nace del corazón, Bajo de Guía hará que el público sienta todo aquello que este sanluqueño ha sentido en su, corta, pero intensa trayectoria.
Descrito desde su Flamenco más jondo, de una profundidad y sentimiento desgarrador, hasta las alegrías, reinas de su cuna sanluqueña, que dibujan sonrisas en los corazones y hace que los más profundos sentimientos los revivamos a flor de piel. Diego Villegas utiliza la expresión “Bajo de Guía”, como un juego de palabras, ya que en la vida, todos viajamos “bajo una guía” que nos muestra el camino. Por ello, describe paso a paso la relación con su Sanlúcar, su gente y como no, su historia.
Sin duda es una buena noticia que jóvenes músicos de calidad lleguen, para quedarse. Villegas domina casi todos los instrumentos de viento. Usualmente los que toca en directo son el saxo soprano, la flauta y la armónica, pero también es habitual verlo con el clarinete y el saxo tenor. Un autentico placer para el oído disfrutar de estos sonidos saliendo de estos instrumentos, que no son los que suelen utilizarse en el flamenco, pero que ya están más que aceptados, incluso por los más radicales puristas.
