Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado lunes en Torremolinos (Málaga) a un hombre de nacionalidad española y 47 años de edad que se encontraba fugitivo desde 2006 y que tenía una orden de detención e ingreso en prisión decretada por el Juzgado de Instrucción número 2 de Mataró (Barcelona).
Así, los investigadores comenzaron las pesquisas a mediados del mes de marzo, ya que situaban al fugado en dicha localidad de la Costa del Sol, según han informado en un comunicado. Tras confirmar su presencia en este lugar, y centradas las investigaciones en torno al domicilio familiar, fue arrestado y ya ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial, que ha ordenado su ingreso en prisión.
El hombre comenzó su estafa, que llegó a superar los nueve millones de euros y afectó a alrededor de 150 personas, con un negocio inmobiliario que regentaba. Así, a través del mismo recibía importantes cantidades de dinero bajo la promesa de devolverlo con un interés muy elevado, después de invertirlo en negocios inmobiliarios.
Las víctimas, entre las que figuraban familiares y empleados de su propia empresa, le habrían entregado cantidades que iban desde los 6.000 a los 360.000 euros.
Cuando le daban el dinero, les ofrecía un documento en el que reconocía la deuda y especificaba los plazos en que se lo devolvería y el interés que les reportaría, prometiendo a su vez unas tasas entre el 20 y el 40 por ciento anual y, en algunos casos, llegando a ofrecer hasta el 150 por ciento. Así, una vez vencido los primeros plazos iniciales, respondía a los intereses prometidos, ganándose la confianza de sus posibles clientes.
Sin embargo, a mediados de junio de 2006, empezó a dilatar los pagos y a evitar a los clientes, que sólo podían hablar con el personal de su agencia inmobiliaria, para acto seguido desaparecer del lugar, recalando posteriormente en Torremolinos.
