El PP y Ciudadanos han dado hoy un primer paso para cerrar un acuerdo que permita la investidura de Cristina Cifuentes en la Comunidad de Madrid, tras repartirse entre ambas formaciones la presidencia y la vicepresidencia primera de la Cámara autonómica, que ocupará el partido de Albert Rivera.
La candidata popular en la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, y el cabeza de lista de Ciudadanos, Ignacio Aguado, han mantenido en la víspera de la constitución del parlamento madrileño un encuentro en el que han sentado las bases para iniciar inmediatamente las negociaciones sobre un acuerdo programático.
Esa reunión ha cerrado una nueva jornada de negociaciones para la definición del nuevo mapa autonómico, cuyas líneas se vislumbran ya con claridad en Castilla-La Mancha y Extremadura, pero se difuminan en Murcia y Andalucía.
En la comunidad andaluza, ochenta días después de las elecciones, la presidenta en funciones, Susana Díaz, ha iniciado el último intento de concitar suficientes apoyos o al menos abstenciones para su investidura antes del sábado 13 de junio.
De lo contrario, se mantiene en sus trece de convocar de nuevo elecciones, un escenario que parece hoy un poco más cercano que ayer después de que el presidente regional del PP, Juanma Moreno, haya sugerido al PSOE que presente otro candidato a la investidura que no sea Díaz.
Descartado el apoyo del PP, el papel de Ciudadanos puede ser clave para evitar la repetición de las elecciones en Andalucía, pero también para permitir gobiernos 'populares' en varias autonomías, entre ellas Murcia, donde los contactos han encallado ante la ausencia de acuerdo sobre la dimisión del exalcalde de Murcia y secretario regional de los populares, Miguel Ángel Cámara.
Ciudadanos reclama la dimisión de Cámara, además de las del delegado del Gobierno, Joaquín Bascuña y la alcaldable de Fuente Álamo, María Antonia Conesa, por estar imputados y advierte de que son "innegociables" para mantener las conversaciones.
Por el contrario, las negociaciones entre el PSOE y Podemos están "muy avanzadas" en Castilla-La Mancha y Extremadura, según ha reconocido el secretario general de Podemos, Sergio Pascual.
Hoy se ha producido la primera reunión cara a cara entre el candidato del PSOE a presidir el Gobierno de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el secretario regional de Podemos, José García Molina, y ambos han expresado su satisfacción y su optimismo ante un posible acuerdo para la investidura del primero.
El acuerdo sobre el que trabajan se traduciría en doce medidas agrupadas en tres temas: rescate ciudadano, transparencia y participación, y Estatuto de Autonomía.
Sergio Pascual, además de destacar los avances en las negociaciones en esos dos territorios, ha subrayado que el "bloque de cambio" en la Comunidad Valenciana y Baleares parece "consolidado".
En la primera de ellas, hoy se ha producido una nueva reunión entre el PSPV, Compromís y Podemos para acercar posturas para un posible acuerdo de investidura, un pacto que el candidato socialista, Ximo Puig, quiere alcanzar esa misma semana.
Para ello, los socialistas mantienen su voluntad de apoyar a Joan Ribó, de Compromís, como alcalde de Valencia, e incluso podrían ceder a uno de sus socios la Presidencia de Les Corts, donde hoy se han reunido Puig y la líder de Compromís, Mónica Oltra.
En Baleares, siguen las reuniones entre PSIB, Podemos y MÉS para avanzar en asuntos programáticos y hoy han consensuado la creación de un impuesto directo a las entidades financieras que tengan viviendas vacías, como parte de las líneas programáticas del futuro Govern que negocian los tres partidos.
Donde no es probable el acuerdo entre los socialistas y Podemos es en Asturias. Ante el rechazo del presidente en funciones, Javier Fernández, a apoyarse en Podemos, el candidato de este partido ha propuesto a IU un "gobierno de excepción de medidas urgentes" no presidido por el PSOE, una oferta que ha caído en saco roto.
En Aragón, otro de los escenarios de posibles acuerdos postelectorales, Podemos ha hecho público un decálogo en el que va a basar su negociación con medidas como una ley contra la corrupción y el clientelismo, la reducción de altos los cargos y la despolitización de la televisión pública aragonesa.
Pero los partidos no sólo tratan de resolver el rompecabezas autonómico, sino que apuran los últimos días para alcanzar pactos municipales antes de que se constituyan los ayuntamientos el próximo sábado 13 de junio.
Las negociaciones avanzan en Valencia y Alicante, donde hay un principio de acuerdo entre el PSPV, Guanyar y Compromís, mientras que en Castellón el PP ha ofrecido sus ediles a los socialistas y a Ciudadanos para evitar un gobierno en el que estén Podemos y Compromís.
También hay avances en Zaragoza, donde el PSOE y CHA buscan un acuerdo programático para apoyar al la investidura del candidato de Zaragoza en Común, Pedro Santisteve.
Y en Madrid, donde se da por hecho el respaldo del PSOE a Manuela Carmena, la candidata de Ahora Madrid ha reconocido que en líneas generales hay un acuerdo de gobernabilidad con los socialistas "al 99 por ciento" y, aunque ha insistido en que prefiere ser más prudente, cree que "todo va a ir bien".