En la mañana del lunes, responsables de la 'Plataforma por el derecho a una vivienda digna' entregaron en el registro municipal de la plaza de San Juan de Dios de Cádiz sus alegaciones al borrador del Plan Municipal de Vivienda elaborado por el anterior equipo de Gobierno del Partido Popular, un plan éste último que según la plataforma “debe ser retirado porque no da cumplimiento a las necesidades en materia de vivienda de la ciudad”, dado que “fue elaborado con prisas para poder presentarlo antes de las Elecciones Municipales del pasado mes de mayo”.
De hecho, estos planes son obligatorios por Ley para todos los municipios. El primer paso se dio en noviembre de 2011 cuando el equipo de Gobierno que encabezaba Teófila Martínez aprobó en Pleno proceder a su elaboración, pero no fue hasta el pasado mes de abril del presente cuando cuándo se llevó a un nuevo Pleno, para ser presentado el pasado 28 de mayo, con un plazo de alegaciones al mismo que concluía el 30 de julio, aunque ha sido ampliado hasta el 30 de septiembre por el nuevo equipo de Gobierno.
Rafael Lara, miembro de la Plataforma por el derecho a una vivienda digna, indicó este lunes que “era un plan cuyo objetivo era electoralista, se hizo de forma apresurada, como para salir del paso”, de ahí que pide que se elabore uno completamente nuevo.
Para este colectivo que agrupa a 17 organizaciones distintas, el Plan Municipal de Vivienda falla tanto en el aspecto técnico, al no aportar datos básicos como el número de viviendas que están en manos de las entidades bancarias o el número de infraviviendas que existen en Cádiz, como en los objetivos del mismo, ya que prefiere fomentar la venta antes que el alquiler y la construcción antes que la rehabilitación. También, dice este colectivo, el Plan de Vivienda contiene datos contradictorios, incluso cuando habla de infravivienda, dando cifras distintas según en qué apartado del mismo se mencionen.
Por todo ello, las alegaciones se han elaborado en dos partes, por un lado, un análisis del contenido del plan y de las informaciones y datos que ofrece, y una segunda parte en las que se avanzan las propuestas, ya que “ni compartimos el diagnóstico, ni por supuesto, sus objetivos y estrategias, los cuales se basan en “una opción prefijada”. Y es que tras analizar los datos, sobre todo entre demandantes de viviendas y las que habría disponible según previsión, “unas 1.017 familias se quedarían fuera y tendrían que buscarse una solución fuera de la ciudad”.
Y ante esta situación, y otras muchas puntualizaciones, la plataforma concluye que es necesario que el actual borrador de Plan Municipal de Vivienda sea retirado y se elabore uno nuevo sobre también nuevas bases. Un nuevo plan que se elabore en torno a la participación ciudadana, que apueste por alquileres sociales y que se centre en elaborar un diagnóstico más certero sobre la realidad de la vivienda en Cádiz. No olvidan tampoco la importancia de tener asegurada la financiación y de ahí que soliciten que se establezcan líneas de colaboración con la Junta de Andalucía.
