El candidato de Junts pel Sí a la Generalitat, Raül Romeva, ha asegurado hoy que si gana la independencia "el mejor aliado que tendrá España en Europa será Cataluña, y ha dicho que no hay duda de que el mejor aliado de Cataluña será España", ya que les unen muchos intereses en común.
"Europa es un espacio donde visualizar un futuro compartido", ha apuntado durante su conferencia en el Fórum Europa-Tribuna Catalunya.
Romeva ha asegurado que a "Europa le interesa" que se solucione la actual tensión entre la Generalitat y el Estado español porque una mejor colaboración entre estas administraciones revertiría en una mejor marcha de la economía de ambas, y por extensión de Europa.
En este sentido, ha acusado al PP y al PSOE de actuar en contra de los intereses españoles en el Parlamento Europeo cuando hay que apoyar proyectos que favorecen a Cataluña, como en el caso del Corredor Mediterráneo.
"Hay quien prefiere perjudicar al conjunto del Estado si esto perjudica también a Cataluña", ha recriminado el exeurodiputado, que ha explicado que se convenció de que "la única vía" era la independencia gracias a sus experiencias en la institución europea.
El candidato ha augurado que un "mandato democrático claro" a favor de la independencia el 27 de septiembre "desbloquearía" el silencio de los miembros de la Unión Europea respecto al debate soberanista en Cataluña.
No obstante, ha destacado que ninguno de ellos ha rechazado explícitamente que se convoque a los catalanes a las urnas para un referendo de autodeterminación, y ha puesto como ejemplo las declaraciones de la Canciller alemana, Angela Merkel, esta semana, cuando pidió que se respetara la soberanía de España.
"Apoyo explícito no tendremos, pero que no lo hayan prohibido o impedido también dice muchas cosas", ha insistido Romeva, que ha descartado que una hipotética Cataluña independiente quede fuera de la Eurozona porque "a nadie le interesa".
El candidato de Junts pel Sí también ha aprovechado para censurar las declaraciones de quienes comparan el proceso soberanista con el nazismo de los años 30 en Alemania e Italia.
"No hay nada peor para un francés o un alemán que comparar un movimiento democrático y pacífico con esos hechos", ha avisado Romeva, que ha señalado que este tipo de comparaciones son fruto de la "falta de argumentos".
