Primer gran revés del pleno

El PSOE defendió en su balance de los primeros cien días de gobierno que se puede gobernar en solitario, y así es durante la mayor parte del tiempo. Para los momentos puntuales en los que no pueda hacerlo, caso de la aprobación del presupuesto anual, necesitará llegar a los plenos con un alto grado de consenso para sacar adelante su gestión. Ayer fue uno de esos momentos, y se saldó con el primer gran revés al ejecutivo socialista en sus tres meses y medio de mandato. El Gobierno planteó la solicitud de un anticipo al Estado por importe de 49 millones de euros, correspondientes a la PIE del año próximo, con el objetivo de contar con liquidez para hacer frente a pagos a proveedores, servicios o la nómina de la plantilla municipal. Sin embargo, se encontró con las abstenciones de IU, Ciudadanos y Ganemos Jerez, y el voto en contra de PP, por lo que tuvo que aceptar la propuesta de la oposición de volver a abordar esta cuestión en un Pleno Extraordinario antes de quince días, que es la fecha en la que expira el plazo para plantear la solicitud. El PSOE habló de “incongruencia del PP” al rechazar la propuesta, pero lo cierto es que el Gobierno local se presentó en el pleno sin consenso previo y sin argumentos para convencer a la oposición, sin olvidar otro detalle importante: dejó en evidencia, por si todavía quedaba alguna duda, la crítica situación de las arcas municipales. Es difícil calibrar si lo vivido ayer tendrá alguna repercusión futura en forma de pacto, pero al menos debería servir de lección.