El alemán Nico Rosberg y su escudería, Mercedes, dominaron de punta a punta los entrenamientos libres y la clasificación del Gran Premio de Brasil, prueba que, además de perder la emoción con el título anticipado del británico Lewis Hamilton, fue tocada por la tristeza a raíz de los ataques terroristas en Francia.
La lucha por el subcampeonato de la temporada entre el propio Rosberg y su compatriota Sebastian Vettel (Ferrari), que era el único aliciente para la penúltima carrera del año, pasó todavía más a un segundo plano por el eco y el sinsabor que dejaron en el 'Gran Circo' los atentados en la capital francesa.
París, sede de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), sufrió una serie de ataques terroristas que causaron al menos 129 muertos y más de 350 heridos.
El mundo del automovilismo no fue ajeno este sábado al trágico episodio y la FIA, a través de su presidente Jean Todt, anunció que la carrera brasileña tendrá este domingo un minuto de silencio en homenaje a las víctimas.
Durante la vuelta de presentación los pilotos llevarán un brazalete negro, mientras ondea una bandera francesa con un lazo negro. Paralelamente, la FIA homenajeará a las víctimas en carretera de todo el mundo.
Pilotos como el francés de origen suizo Romain Grosjean (Lotus) -que corrió ya este sábado con un brazalete de luto-, los alemanes Rosberg y Vettel y los españoles Carlos Sainz (Toro Rosso) y Fernando Alonso (McLaren) expresaron también su sentimiento de solidaridad.
La lluvia, cuya probabilidad durante la clasificación era del 80 por ciento, fue relegada por el sol del entrante verano paulista, pero la insipidez de una temporada con el resultado conocido de antemano mantuvo calmada a la afición brasileña.
Sin la cantidad ni euforia del público de otras ediciones de la única carrera suramericana de Fórmula Uno y con la ausencia de personalidades de la política, la farándula y otros deportes que acostumbraban visitar los garajes, el circuito de Interlagos pasará esta vez como una prueba más.
En lo deportivo, la posibilidad matemática de que Vettel suba al segundo lugar de la clasificación quedó mucho más atrás, después de que el cuatro veces campeón mundial no pudiera superar con su coche rojo a los bólidos de Mercedes.
Vettel se tuvo que conformar con el tercer lugar en los libres y en las sesiones de la clasificación.
El lote intermedio de pilotos no tuvo mayores sorpresas, con los latinoamericanos bastante juntos e intentando arrebatarse entre ellos posiciones.
Los brasileños Felipe Massa (Williams) y Felipe Nasr (Sauber) fueron irregulares, con cierto repunte del primero en la clasificación, mientras que el venezolano Pastor Maldonado (Lotus), que parecía haber conseguido un desempeño favorable en el tercer libre, cayó en el cedazo de los primeros eliminados hacia la 'pole'.
El mexicano Sergio Pérez (Force India) mostró los progresos de su monoplaza de motor Mercedes y mantuvo intacta su opción de conservar el noveno lugar del Mundial de Pilotos, así como la quinta posición de su escudería en el de Constructores.
Un capítulo aparte merece Alonso, que a pesar de ser el piloto con más puntos en Sao Paulo, una plaza que lo consagró por primera vez como campeón mundial en 2005 al bordo de un Renault, este año tuvo contratiempos en el segundo libre y debió abandonar la primera ronda de la sesión clasificatoria por problemas con su coche.
El Gran Premio de Brasil es la penúltima carrera del Mundial de Fórmula Uno 2015, una circuito de 71 vueltas y 4.309 metros de trazado.