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Huelva

18 meses de cárcel por conducir ebrio a 80 km/h por la ciudad y lesionar a un peatón

La sentencia lo considera responsable de un delito contra la seguridad vial por conducción temeraria en concurso con otro de lesiones por imprudencia grave y le impone, además de la pena de cárcel, la privación del derecho a conducir vehículos de motor y ciclomotores durante cinco años

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El Juzgado de lo Penal número 2 de Huelva ha condenado a 18 meses de cárcel a un vecino de la capital onubense después de que condujera ebrio a 80 kilómetros por hora por dentro de la ciudad y lesionara, al tratar de huir de la Policía, a una mujer que se bajaba de un vehículo con el que colisionó.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, lo considera responsable de un delito contra la seguridad vial por conducción temeraria en concurso con otro de lesiones por imprudencia grave y le impone, además de la pena de cárcel, la privación del derecho a conducir vehículos de motor y ciclomotores durante cinco años; lo absuelve, sin embargo, del delito de resistencia que se le imputó inicialmente.

Se considera probado que el 26 de enero de 2014, sobre las 6:00 horas, el acusado conducía un vehículo propiedad de su hermano, bajo efectos de bebidas alcohólicas y a velocidad aproximada de 80 kilómetros por hora por el casco urbano de la ciudad.

Al ser observado por agentes de la autoridad, fue requerido para que se detuviera, haciendo caso omiso el acusado y continuando su marcha a gran velocidad, sin respetar señales de ceda el paso y de semáforos en rojo en cruce de calles de la cuidad.

Debido al exceso de velocidad, el acusado perdió el control del vehículo y colisionó contra la parte trasera de otro turismo cuando este se encontraba detenido en la calle mientras varias ocupantes descendían del mismo y como consecuencia del impacto recibido una de ellas resultó con heridas que precisaron para su curación de asistencia tratamiento.

Tras el impacto, el acusado maniobró y continuó su marcha sin la mínima atención a lo sucedido, hasta que fue localizado por agentes de la autoridad que lo perseguían, tras observar que el acusado abandonaba su vehículo en la mitad de la calle y trataba de refugiarse en el interior del domicilio, mostrándose alterado y agresivo con los agentes de la autoridad y su actuación.

Sometido el acusado por agentes de la autoridad a pruebas de medición de alcohol, estas ofrecieron resultado de 0,65 y 0,67 mlg/litro de aire expirado.

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