El Sindicato de Enfermería (Satse) ha lamentado que "no se haya paralizado hoy mismo" el nuevo plan funcional en las consultas de la puerta de urgencias del Hospital de Valme, y que la Dirección Gerencia del centro "no se haya comprometido" con la dotación enfermera auxiliar las 24 horas del día en las urgencias pediátricas, tras la concentración que han protagonizado este miércoles los profesionales de enfermería --unos 75-- a las puertas del hospital sevillano.
Así lo ha indicado a Europa Press la secretaria provincial de Satse Sevilla, Reyes Zabala, quien ha explicado que durante la concentración "se ha provocado un reunión urgente" con la directora gerente, Dolores Alguacil, en la que han participado Satse, el Sindicato de Auxiliares de Enfermería (USAE), CCOO y CSIF, y en la que se le ha pedido "la paralización del nuevo plan organizativo en la puerta de urgencias, que no repercute positivamente en la asistencia al usuario ni en las condiciones de trabajo de los profesionales; la dotación de las urgencias pediátricas que no están cubiertas las 24 horas del día y no están dotadas adecuadamente; y la adecuación de las infraestructuras".
Ante estas peticiones, Zabala explica que la directora gerente "se ha comprometido a hacer un estudio rápido de la situación de las urgencias", pero "ha dilatado el tema de aquí a Semana Santa", aunque, critica, "no ha atendido la petición de volver a trabajar como antes, un modelo organizativo donde las carencias se hacían menos visibles".
"No ha habido solución inmediata, solo una declaración de intenciones", señala la secretaria provincial, que informa de que el próximo lunes se celebrará una asamblea "para con la decisión mayoritaria de los profesionales proceder a lo que mayoritariamente se vote", aunque "entendemos que hay que tomar medidas urgentes y contundentes cuando más de un 80% de profesionales han traslado que no se está trabajando en condiciones".
Además, Zabala apunta que "no descartan" nuevas movilizaciones porque "realmente no hay nada resuelto", a la vez que afirma que "todo es una improvisación continua" y que "a la gerente se le han puesto sobre la mesa muchísimos argumentos para que la decisión de hoy hubiera sido parar este modelo organizativo y volver al anterior". "No lo ha hecho, ha pedido tiempo, y ahora serán los profesionales quienes digan si se lo dan o no", concluye.
