El Ayuntamiento ha presentado este miércoles a los grupos políticos y a los más de 40 representantes de las entidades que forman parte de la mesa de movilidad las bases sobre las que se han elaborado los pliegos para la redacción de un Plan de Movilidad Urbana Sostenible de la ciudad, que será licitado en junio y que está previsto que se adjudique a una empresa externa en septiembre.
El plan, cuya redacción tendrá un presupuesto superior a los 300.000 euros (de los que 120.000 euros ya están consignados en los presupuestos de 2016), tiene un plazo de redacción de 18 meses, aunque se barajan una serie de mejoras para agilizar los trámites y reducirlo a 16 meses. Meses arriba o abajo, lo cierto es que dicho plan de movilidad, que el Ayuntamiento quiere que se planifique con vistas a que sea ejecutable en un horizonte temporal de diez años, no estará listo hasta la primavera de 2018, mientras que el equipo de gobierno socialista se comprometió con C’s (como acuerdo para apoyar los presupuestos) a que dicho plan estaría finalizado antes del 31 de diciembre de 2016.
Al respecto, el delegado de Movilidad, Juan Carlos Cabrera (el alcalde no estuvo presente en la mesa), señaló ayer que “es materialmente imposible” y “poco serio” redactar un plan de movilidad para la ciudad en cuatro meses. “La promesa con C’s está más que cumplida y hay que elegir si se quiere elegir algo serio para diez meses o hacerlo en tres meses”, dijo.
Una vez adjudicada la redacción del plan, la empresa elegida elaborará una “foto inicial” de cuáles son los flujos de desplazamientos de la ciudad valiéndose de cerca de 40.000 encuestas que se realizarán a los ciudadanos. De ellas, entre 8.000 y 11.000 se realizarán a domicilio; 8.000 se realizarán a los usuarios de Tussam (encuestas “sube-baja”) y otras 20.000 encuestas serán de intercepción en cordón (encuestas pantalla) en los principales viarios.
Estas encuestas arrojarán datos para ver cómo se abordan los objetivos (movilidad activa priorizando al peatón, la bicicleta y al transporte público), después se plantearán las propuestas y finalmente se redactará el plan.
El “día a día”
El Ayuntamiento explicó que, mientras se tramita y redacta el plan, se pondrán en marcha de manera más inmediata otras medidas referentes a la movilidad, como las obras de reordenación en Blas Infante (este verano) para poder poner en marcha la lanzadera que conecta con la Cartuja a partir de septiembre o la instalación también en septiembre de cuatro radares fijos de limitación de velocidad que iran rotando en doce vías de la ciudad y que quedarán debidamente señalizados (se trata de una medida disuasoria y no recaudatoria).
También se llevará a cabo de inmediato una primera fase del plan de la bicicleta para el Casco Histórico, que incluye las medidas del documento redactado por A contramano, que no necesitan un cambio en la ordenanza de circulación tales como nueva señalética en calles con la limitación a 30 km/h (todas las del Casco Histórico) en la que la prioridad es para el peatón y para el ciclista y ciclocalles con señalización horizontal y vertical. Tendrán que esperar, sin embargo, las calles a contramano.
La mesa de movilidad volverá a ser convocada en septiembre, una vez que se adjudique la redacción del proyecto, para que la adjudicataria pueda explicar a sus miembros qué es lo que va a desarrollar y en qué plazos.
Cabrera explicó que esta mesa se irá convocando a medida de que se vaya avanzando en etapas de este plan de movilidad y que, las propuestas de esta vez serán estudiadas para su posible inclusión en los pliegos que se van a licitar o en la propia redacción del proyecto. Algo de lo que no se mostraron muy seguros algunos de los representantes de las entidades, que señalaron que sus puntualizaciones habían sido escuchadas pero que la jornada había servido para que el Consistorio explicara cuáles eran sus planes y lo que se iba a realizar que para hacer reales sus propuestas.
La participación, puesta en cuestión por los grupos y entidades
Tanto grupos políticos como parte de las entidades presentes en la mesa de movilidad cuestionaron ayer la función participativa de este instrumento que fue anunciado por el alcalde, Juan Espadas, como la “panacea de la movilidad”, según recordó Participa Sevilla.
Tras una jornada maratoniana de cinco horas (Participa e IU se levantaron tras debatir el primer punto) los representantes políticos coincidieron en señalar que la participación había sido un “paripé”, ya que el gobierno sólo se había limitado a informar de lo que se iba a hacer, a pesar de que Cabrera después señaló que algunas de las propuestas serían tenidas en cuenta en los pliegos y en la redacción del plan.
La portavoz de Participa, además de criticar la metodología de participación, señaló que la jornada había sido “como el día de la marmota” al no haberse hecho nada desde el 31 de julio. De la misma manera reaccionó el portavoz de IU, que acusó a Espadas de “enterrar” la mesa de la movilidad y de meter más tráfico en el centro. Desde C’s, desde donde recordaron el incumplimiento del PP por no terner listo el plan de movilidad para finales de 2016, señalaron que se habían “perdido diez meses de trabajo” y por parte del PP indicaron que la mesa es tan sólo una justificación de Espadas.
Desde la asociación ciclista A Contramano, tachó de "decepcionante" la mesa de movilidad, señalando que el Ayuntamiento se queda en "buenas palabras". "No podemos menos que calificar de decepcionante que se hayan dejado para estudiar mas adelante las propuestas centrales de nuestro Plan de Movilidad Ciclista, sobre todo tras las declaraciones del alcalde al respecto, que parecían indicar un acuerdo completo", lamenta la organización, según la cual "seguimos sin pasar de las buenas palabras".
