Eva y Juan son mitad y todo de Amaral. El grupo aragonés traerá al Auditorio Municipal de Málaga, el 18 de junio, las letras y los sonidos de su nuevo 'Nocturnal', un disco introspectivo “más físico en los ritmos” y que habla del individuo.
"Somos un grupo muy al margen de lo que es la industria"‘Nocturnal’ salió a la venta el pasado octubre y la gira representa la puesta de largo de este disco.
¿Constituye un cambio radical en vuestra filosofía musical?
–Juan: Es una evolución. Es un disco más físico en los ritmos, pero hay elementos que son reconocibles, como es la voz de Eva y nuestra manera de tocar. Cada disco marca una evolución lógica y natural respecto a los anteriores. Hemos oído opiniones de todo tipo, que si es más Amaral que nunca, que si es distinto... Nos encanta que haya diversidad de opiniones.
Han pasado cuatro años desde vuestro último trabajo y quizás ha sido mucho tiempo.
– Eva: Sí. Demasiado tiempo, pero hemos estado constantemente de gira por España, Latinoamérica, Europa. Cuando hemos tenido un momento de calma para podernos juntar, hemos puesto en común ideas para vestir esas canciones y experimentar sonidos.
¿Han vivido la crisis fuera de España?
– Juan: Yendo y viniendo. Pero aquí dejamos a nuestros amigos, a nuestra familia y a la gente de nuestra ciudad y hemos estado al tanto de lo que sucedía en nuestro país en estos tiempos raros que nos ha tocado vivir.
¿Qué opinan de los que dicen que este álbum deja una huella reivindicativa?
– Eva: El disco habla realmente de las personas, del ser humano, no es una visión social; habla más del individuo. Lo que pasa es que cuando hablas del amor, de cómo se relacionan las personas entre sí y cuáles son esos vínculos entre cada uno de nosotros se termina plasmando el entorno en que están esos personajes. Termina filtrando la realidad que vives o la realidad que te gustaría vivir. Eso hace resaltar más la diferencia que hay con la que vives. En el fondo no es más que un retrato de un momento y ahí está para bien y para mal.
¿Y qué les parece el momento que vivimos?
– Eva: Convulso.
– Juan: Creo que es un momento en que no hay que perder la esperanza y que las cosas pueden ir para adelante si todos decidimos que mejoren y que vayan para adelante. Me gustaría lanzar un mensaje de optimismo.
Amaral, de hecho, está esquivando la crisis. Ha recibido el Disco de Oro por las 20.000 copias vendidas de ‘Nocturnal’ y la gira está siendo un éxito. Toda una heroicidad. ¿Se sienten unos privilegiados tal y como están las cosas?
– Juan: En esto coincidimos los dos. Muy agradecidos y afortunados por toda la gente que ha entendido nuestra manera de hacer música. En el fondo, siempre hemos hecho lo mismo o hemos pensado de la misma manera desde que tocábamos en pequeños bares de nuestra ciudad. Luego el proyecto creció y empezamos a grabar discos, pero nuestra filosofía es la misma. Ahora mismo somos un grupo muy al margen de lo que es la industria, autoeditamos nuestros discos e intentamos tener una relación directa del grupo con el público. Aparte de dar las gracias aquí, en los medios de comunicación, que no paramos de hacerlo, nuestro deseo es hacer el mejor concierto que podamos. Es lo único que podemos hacer para dar las gracias a toda la gente que nos permite que hagamos música.
Amaral trabaja alejado del mercado de discos. Sin embargo, intentan tacharles de grupo comercial. ¿Qué opinan?
– Juan: Hacemos la música que nos sale. Lo que sí intentamos es que las canciones sean verdaderas. No podemos saber si una canción es buena o mala; eso lo tendrá que decir el público. Imagina cuando ves una película o una serie te metes dentro y te olvidas de que es ficción; es real. Intentamos que nuestras canciones se noten que están escritas por dos personas que son de Zaragoza en el 2016. Que sean verdaderas, que hablen de cosas que les pasa a las personas, que sean sentimientos reales, que no sea algo postizo. Cuando Eva y yo nos ponemos a componer nos olvidamos de las modas y de todo e intentamos que las canciones nos las creamos nosotros primero.
¿Cómo se organizan para componer?
– Juan: Un caos.
– Eva: El secreto quizá está en que no hay ninguna organización; somos un poco caóticos. Han pasado cuatro años desde el último disco, así que organizarnos no es nuestro fuerte.
Así que de separaciones nada.
– Eva: De momento, no.
– Juan: Creo que Eva tiene muchísimo talento y podría escribir sus canciones. Lo que pasa es que siempre hemos disfrutado mucho de la hoja en blanco. Cuando empiezas una canción te olvidas de todos los discos que has hecho antes y te centras en que eso que está en blanco tenga un sentido.
¿Qué les aporta la composición?
– Juan: Es una necesidad, que no sabes muy bien de dónde te viene. Lo hacíamos de pequeños, en un local cuando hacíamos ruido con los amigos y siempre lo hemos hecho así. Es como una necesidad de expresión que a estas alturas todavía seguimos sin saber por qué lo hacemos.
– Eva: Es maravilloso porque en el fondo somos un par de personas introvertidas y que con la música encontraron su forma de expresar cosas que no sabían muy bien cómo hacerlo en su vida diaria. A través de la música hemos conseguido sacar los demonios que teníamos dentro.
Después de muchos años en la carretera, ¿siguen presentes los nervios?
– Juan: Sentimos que nos quedan muchas cosas por hacer. Aunque estemos hablando de los próximos conciertos estamos pensando en el siguiente disco, porque nos gusta mirar para adelante. Son siete discos y sentimos que estamos empezando y aprendiendo muchas cosas.
En esos cuatro años, ¿cómo han cambiado los públicos?
– Eva: No sabíamos quién iba a estar a la vuelta de esos cuatro años y ha sido increíble ver que había un montón de gente esperándonos (risas).
