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Jaén

El aparcamiento del antiguo Hípico, convertido en un vertedero

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  • Junto a la zona de los vertidos -

El grupo del PSOE en el Ayuntamiento de Jaén, junto a vecinos de La Alameda, lamentaron ayer la “pasividad” del gobierno local del PP con los “problemas de limpieza y ocupación” de los terrenos del aparcamiento del antiguo Hípico. Las concejalas socialistas María Isabel Lorite y África Colomo visitaron la zona con algunos de los residentes que se quejan de que el terreno se ha convertido “en un vertedero improvisado en pleno centro de la ciudad”. Colomo explicó que los vecinos han pedido en repetidas ocasiones al Ayuntamiento la limpieza del entorno.
Del mismo modo, los residentes también han alertado de “la presencia de personas en una nave abandonada” situada en los terrenos donde se encuentra el aparcamiento. “Han colocado incluso un candado en la puerta de la nave y, al no existir ningún tipo de saneamiento quienes ocupan esta edificación hacen sus necesidades en recipientes que vacían cerca de las viviendas y sacan al exterior los restos de comida, ropa usada y de basura que encuentran por la ciudad”, detalló  Colomo. A su juicio, los vecinos de esta zona son ya víctimas por partida doble de esta “dejadez” en la gestión municipal del alcalde, Javier Márquez, ya que los residentes que sufren los problemas de limpieza del terreno del aparcamiento están además afectados por “la falta de canalización de las aguas fecales en la calle Agustina de Aragón”. “Desde hace años reclaman la colocación de un colector que traslade las aguas residuales metros debajo de la calle hacia las laderas cercanas. Al no haber respuesta municipal ni exigencia del PP a la concesionaria del servicio, Aqualia, los vecinos están siendo pasto en este tiempo de los malos olores en verano y de los deslizamientos en el terreno, ya que por el subsuelo las aguas fecales discurren sin control”, dijo.

La Carrera
El PSOE también ha criticado lo que considera una “chapuza exprés” del alcalde tras el parcheado con alquitrán de los socavones del adoquinado en la confluencia de las calles Campanas, Ramón y Cajal y Bernabé Soriano con la Plaza de San Francisco. “Es una vergüenza que se tape con alquitrán una calle adoquinada a la sombra de la Catedral, que se haga porque no se ha mantenido la zona como debiera durante estos años y que haya que hacerlo de esta manera tan chapucera que ha causado sonrojo a los viandantes”, señaló la edil María Isabel Lorite,que aludió también a la “improvisación” municipal tras el botellón de Nochevieja en San Ildefonso

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